Oaxaca.- “México se ha convertido en el país donde pasa de todo y no pasa nada”, declaró el periodista y escritor Wilber Torre durante la presentación de su libro Panama papers: el expediente mexicano, llevada a cabo la tarde de este martes en el foro de la 36 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO).
Acompañado por el documentalista Roberto Olivares, Torre explicó que su obra parte del reciente escándalo de fuga de fondos hacia paraísos fiscales por parte de notables empresarios y funcionarios del mundo, incluidos muchos mexicanos. A partir de esto, hace un recuento de los casos de corrupción desde el gobierno de Lázaro Cárdenas del Río hasta nuestros días.
“Venimos arrastrando un régimen de autoritarismo e impunidad, el régimen del PRI. Después de la transición, este régimen mutó en un régimen de partidos. Ustedes recordarán la oposición de verdad, ese PAN de los 70 y 80 que protestaba, luego la izquierda con el PRD. Esas eran oposiciones de verdad que querían combatir el régimen”, declaró Torre.
“Luego ese régimen de PRI se transfirió a los otros partidos y se volvieron un sistema de intereses y corrupción que les facilita mantener el control del país. Todo está estructurado para que pensemos que no pasa nada”, continuó el periodista de investigación.
Como ejemplo de esto citó el reciente caso de la “Casa Blanca” del presidente Enrique Peña Nieto y su esposa, que no trascendió más allá de un escándalo momentáneo. “En México la corrupción política está legalizada, no es sancionada porque las leyes no regulan los conflictos de intereses de este tipo”, agregó.
Torre refirió que si bien es más difícil saquear las arcas del país como en gobiernos pasados, gracias a las leyes de transparencia, la corrupción ha encontrado nuevas rutas para perpetuarse en el sistema político mexicano. “Ahora esta corrupción se da a través de contratos con grandes empresas”.
Al respecto, recordó que a diferencia de México, en otros países la población tomó medidas al conocer casos de corrupción como Panama Papers. Tal es el caso de Finlandia, donde el primer ministro fue derrocado inmediatamente después de conocerse el desvío de fondos estatales que había realizado.
“Quise escribir este libro como un ejercicio de memoria histórica. Me remonto hasta la época del general Lázaro Cárdenas, cuando empezaron los desvíos de fondos luego de la expropiación petrolera”. Como una de las características del volumen, Torre resaltó la inclusión de 15 infografías donde se detallan los resultados de su investigación.
La biblioteca en el centro comercial: el caso de la Fundación La Fuente
Como parte del intercambio cultural y de experiencias con Chile, país invitado especial, la 36 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO) llevó a cabo la tarde de este martes la conferencia Biblioteca moderna: el caso de la Biblioteca Viva de la Fundación La Fuente, a cargo del facilitador de lectura chileno Claudio Aravena.
En dicha ponencia, Aravena habló sobre la Biblioteca Viva, un ambicioso y poco común proyecto consistente en bibliotecas afincadas en centros comerciales a lo largo de Chile. Este proyecto surgió en 2003 por iniciativa de la Fundación La Fuente en asociación con la empresa Mall Plaza.
El proyecto, pese a tener costo a través de membresías, ha resultado sumamente exitoso, ya que a lo largo de su existencia ha abierto nueve bibliotecas en plazas comerciales, con servicios como préstamo de libros, actividades culturales, talleres y más. Esto ha hecho merecedora a la red de siete reconocimientos.
“La gente va al centro comercial a otra función, a comprar, a pagar una cuenta, a hacer un trámite, y se encuentran con una biblioteca. El sólo hecho de que esté en un espacio no tradicional la hace distinta y llamativa. Es una biblioteca muy contemporánea, un espacio de educación no tradicional donde te encuentras con otros, donde hay libros, puedes estar trabajando, juntarte con alguien”, explicó Aravena.
“Es un proyecto bastante exitoso. Lo visita un millón de personas al año, de los 17 millones de habitantes de Chile. Este proyecto tiene un impacto muy profundo, más de 30 mil personas asisten a las actividades durante el año en las nueve bibliotecas. Existe una continuidad, las personas se inscriben, a pesar de ser un sistema pagado. No es de alto valor hemos querido que sea accesible, la membresía de una persona adulta tiene un valor de 11 dólares, y para niños es la mitad”, continuó el gestor.
Al respecto de este éxito, Aravena refirió “los desafíos y las necesidades de las personas han ido cambiando con el tiempo. Yo creo que la información que antes se buscaba en una biblioteca se puede conseguir en tu casa con la conexión a internet. Eso ha hecho que las bibliotecas sientan un desafío de poder conquistar a las personas”.
“En el caso nuestro es claro, hay sistemas que son gratuitos pero que a veces no ofrecen lo que la gente pide. Nosotros por ser un sistema pagado tenemos la misión de hacerlo, porque la gente está pagando por un servicio, esa es la diferencia. Si la gente está pagando y tratando de hacer un esfuerzo, debemos ofrecerle lo máximo posible. Eso hace que el ritmo de las personas no decaiga”, concluyó.
Una sesión de preguntas y respuestas con la participación de promotores de lectura y bibliotecarios cerró este encuentro en el que se intercambiaron estrategias para fomentar el hábito lector a través de nuevas estrategias.
