Para evitar tráfico de drogas e inmigración ilegal, buscando evitar aranceles.

El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, aseguró al expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, que Canadá reforzará las medidas de seguridad en la frontera común, considerada una de las más extensas y abiertas del mundo. Así lo reveló un alto funcionario canadiense este domingo.

El pasado viernes, Trudeau viajó a Florida para sostener una cena privada con Trump, en la que discutieron temas como la seguridad fronteriza, el comercio y la crisis de drogas que afecta a Estados Unidos.

Trump ha amenazado con imponer aranceles a las importaciones canadienses si Ottawa no actúa para evitar el paso de drogas e inmigrantes ilegales hacia territorio estadounidense. Esta medida podría afectar gravemente a la economía de Canadá, dado que el 75 % de sus exportaciones tienen como destino Estados Unidos.

Medidas de seguridad prometidas por Canadá

Durante la cena, el ministro de Seguridad Pública, Dominic LeBlanc, quien también estuvo presente, detalló que Canadá está dispuesto a implementar medidas más estrictas en su frontera.

Entre las acciones mencionadas se encuentran:

Adquisición de aviones no tripulados (drones) para patrullaje fronterizo.

Incremento en el número de helicópteros de policía.

Redistribución de personal en puntos estratégicos de la frontera.

LeBlanc declaró:

“Es importante demostrar a los canadienses y estadounidenses que estamos tomando medidas visibles y contundentes. Eso es exactamente lo que vamos a hacer”.

En las próximas semanas, el gobierno canadiense proporcionará más detalles sobre estas medidas.

El impacto económico de los aranceles

Trudeau y su equipo enfatizaron que los aranceles perjudicarían no solo a Canadá, sino también a Estados Unidos, debido a la interdependencia de ambas economías.

Trudeau señaló:

«Confío en que los estadounidenses comprenderán que los aranceles no son de su interés. Afectarían nuestras economías profundamente conectadas».

Trump y la lucha contra el tráfico de drogas

Por su parte, Trump afirmó en su red social Truth que ambos líderes abordaron la «epidemia de drogas» en Estados Unidos, destacando el flujo de fentanilo y otras sustancias que llegan desde China y cruzan la frontera norte.

El expresidente subrayó:

“Estados Unidos ya no se quedará de brazos cruzados mientras nuestros ciudadanos son víctimas del flagelo de las drogas. Necesitamos acciones concretas, y eso fue lo que discutimos con Trudeau”.

Relaciones cordiales, pero tensas

Aunque la reunión fue descrita como “muy cálida y productiva”, las tensiones entre ambas naciones persisten debido a las exigencias de Trump y las implicaciones económicas de los posibles aranceles.

El gobierno canadiense se encuentra en una posición delicada, buscando equilibrar sus compromisos de seguridad con la protección de su economía.