Azael Santiago Chepi / Exdirigente de la Sección 22
Oaxaca.- “Si no puedes tener la razón y la fuerza escoge siempre la razón y deja que el enemigo tenga la fuerza. En muchos combates puede la fuerza obtener la victoria, pero la lucha toda sólo la razón vence. El poderoso nunca podrá sacar razón de su fuerza, pero nosotros siempre podremos obtener fuerza de la razón”.
El gobierno federal desde su llegada al poder implemento una estrategia para establecer los andamiajes del nuevo régimen económico y político en el país, generando primero un pacto con diversos grupos de poder que provoco un ambiente de equilibrio de fuerzas a través de la repartición de instituciones y cargos de poder (Pacto por México) desde donde se pactaron y planearon las diferentes reformas estructurales, entre ellas la reforma educativa, laboral, fiscal, energética, en telecomunicaciones, etc., mismas que hoy pretenden consolidar con serias afectaciones al sector de los trabajadores y el pueblo como ya estamos presenciando.
Una de esas reformas es la educativa, la que al gobierno más problemáticas de consolidación le ha causado, por ello la insistencia en la aplicación de la mal llamada reforma educativa ha tenido hoy en Oaxaca otra muestra del autoritarismo del gobierno federal, el anuncio de la “desaparición” del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, con un estado bajo el control de las fuerzas federales representa un golpe estratégico de la federación para imponer “su reforma” carente del consenso y aceptación de los maestros y sociedad.
Los últimos acontecimientos muestran el rostro de un gobierno federal desesperado que refleja un clima de terror en el país, tratando de aniquilar toda protesta social y acallando voces que en forma generalizada se pronuncian en desacuerdo con las políticas públicas que se están imponiendo.
La aplicación de la reforma educativa bajo esta forma autoritaria, con el control de las fuerzas de seguridad pública es un acto indignante, que debe ser repudiado por el movimiento magisterial que se encuentra vigente. Pero también coloca al mismo en una disyuntiva para realizar un análisis y una reflexión desde la base magisterial que permita una adecuada toma de decisiones, es momento de actuar en defensa real de la educación pública y de los derechos de los trabajadores de la educación.
La transformación verdadera de la educación no es a través del control de lo administrativo o la evaluación punitiva y con ello el sometiendo a los maestros.
Por ello la participación de las bases resulta fundamental para retomar las riendas del movimiento magisterial a nivel nacional y estatal, hagamos frente a este momento de definiciones, en unidad, bajo una orientación discutida y mandatada desde la base trabajadora y el pueblo.
Nuestro movimiento debe ser muy inteligente, no caer en actos de provocación, ni de violencia, acciones que seguramente se estarán impulsando para crear escenarios de represión que el estado ya ha preparado.
Las próximas decisiones tendrán que ser las mas responsables de tal manera que el movimiento magisterial asuma esta ofensiva con el pleno consenso del pueblo en la defensa de la educación pública en el cual la autocrítica debe ser el principio fundamental de esta etapa, teniendo en cuenta que se han tomado decisiones que han alejado al magisterio de la sociedad.
Sirvan estas líneas como reflexión, para preparar la ruta a seguir por el magisterio, una ruta con visión a corto y largo plazo que permita reencausar el movimiento.
Profr. Azael Santiago Chepi
@AzaelSChepi