Armando Bonilla
México, DF.- Luego de presentar un proyecto que consiste en el desarrollo de un dron mascota, Efraín Lara Urbina, estudiante mexicano, fue seleccionado para participar en un programa de emprendimiento en Silicon Valley, donde recibió asesoría y retroalimentación para concretar su desarrollo tecnológico.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, el joven mexicano y estudiante de la Universidad Estatal de Sonora (UES), campus Benito Juárez, dijo que su participación en Silicon Valley se dio gracias al proyecto que presentó, mismo que se trata de una mascota inteligente —dron— que apoyaría a sus usuarios en labores cotidianas muy básicas.
Características del proyecto
De acuerdo con el estudiante, aun cuando el proyecto está en una etapa muy temprana, ya se tienen claras las características de lo que se quiere desarrollar e incluso ha comenzado la compra del material necesario con recursos propios.
Explicó que no se trata de un desarrollo tecnológico como tal, sino partir de la tecnología ya existente para mejorarla a nivel hardware y software (algoritmo) con el objetivo de crear una nueva utilidad, en este caso, una mascota inteligente.
“El proyecto que propuse para participar en la selección del programa de Silicon Valley consiste en realizar una modificación a un dron, la cual tiene el objetivo de simplificar su operatividad para que los usuarios puedan controlarlo de una forma tan sencilla como lo hacen al utilizar sus dispositivos móviles”, detalló.
Asimismo, añadió que el objetivo sería convertirlo en una especie de mascota para los usuarios, la cual tendría, en una etapa inicial, la capacidad de apoyarlo en cuestiones tan básicas como tomar un video, una fotografía o acercarle algo.
No obstante, en una segunda etapa se tiene proyectado dotarlo de inteligencia artificial que le permita incrementar su interacción con los humanos y sirva como una mascota de compañía para su usuario.
“La idea, una vez que se hayan probado las funciones iniciales, es continuar con las adecuaciones para dotarlo de inteligencia artificial que le permita tomar decisiones propias, por ejemplo, en caso de que se esté terminando la batería, decida ponerse a recargar solo”.
A pregunta expresa en torno a las etapas del proyecto, mencionó que actualmente se encuentra a punto de recibir el material para su construcción, el cual financió de su propia bolsa, y que espera contar con un prototipo funcional a principios de 2016.
Experiencia en Silicon Valley
Respecto a su experiencia en Silicon Valley, a donde acudió como parte de un grupo de 70 jóvenes, Lara Urbina dijo que se trató de un programa de asesoramiento orientado al emprendimiento de una empresa a partir del desarrollo de su proyecto.
“Yo pensé que el programa estaba enfocado en el desarrollo del proyecto, pero al llegar allá me di cuenta de que no, que más bien se enfocan en formar a los participantes en temas relacionados con el emprendimiento de una empresa”, asimismo, a la generación de redes de contacto directo con grupos de inversionistas; no obstante, precisó que en ese caso las redes de negocio están más orientadas a aquellas personas que ya llevan un prototipo funcional de sus proyectos.
Mencionó que en su caso acudió más a recibir retroalimentación en torno a su idea, “recibí algunos consejos de mejora al desarrollo que realizaré, e incluso consejos que dieron pie a nuevos proyectos que ya comencé a trabajar”.
Señaló también que la posibilidad de participar en el programa de formación de Silicon Valley le permitió cambiar la visión con la cual arrancó el proyecto, misma que básicamente consistía en probar sus habilidades, avanzar en su formación académica hasta el doctorado y posteriormente incorporarse a una gran empresa.
Después de su asistencia a Silicon Valley considera que su proyecto debe sentar las bases para la consolidación de una empresa propia. “Durante el programa de Silicon Valley nos pusieron en contacto con inversionistas, quienes no solo fungen como asesores, sino como redes de negocio en el corto y mediano plazos”.
