*Un grupo de indígenas triquis desplazados de San Juan Copala, que ahora se dicen “víctimas de una agresión”, se manifestaron frente a las oficinas de la Defensoría de los Derechos Humanos para denunciar que sus garantías fueron violentadas
AGENCIA JM

Oaxaca.- Después de que el lunes agredieron e hirieron a elementos de la Policía Estatal que resguardan el Palacio de Gobierno, un grupo de indígenas triquis desplazados de San Juan Copala, que ahora se dicen “víctimas de una agresión”, se manifestaron frente a las oficinas de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), para denunciar que sus garantías fueron violentadas.
Encabezados por Braulio Hernández Hernández, un grupo de familias de la región triqui bloquearon los accesos de la DDHPO, para exigir una audiencia con el ombudsman Arturo Peimbert Calvo, ya que los funcionarios de la Defensoría les niegan el apoyo para denunciar los supuestos abusos de los que fueron víctimas la tarde del lunes.
El activista argumenta que el lunes, durante la manifestación que realizaban frente a Palacio de Gobierno para demandar solución a sus peticiones, fueron agredidos por los uniformados, “por órdenes del gobernador Gabino Cué”, ante su incapacidad por dar una solución a la reubicación de los indígenas desplazados.
Pero los triquis no mencionan que de los dos policías estatales que resultaron lesionados, uno de ellos podría perder el ojo, además de los desmanes que provocaron en los corredores de Palacio de Gobierno en donde pretendían instalar nuevamente su plantón.
El dirigente trqui denunció que dos de sus compañeros de lucha fueron detenidos por los policías y hasta el momento se desconoce su situación jurídica, además de que una indígena de San Juan Copala fue lesionada en la cabeza.
Así también, advirtieron que en la próxima semana podrían trasladar sus movilizaciones a la Ciudad de México para denunciar la falta de capacidad del Gobierno del Estado para dotarlos de terrenos y viviendas para su reubicación, luego de que no existen las condiciones de seguridad para retornar a su comunidad de origen, de donde fueron desplazados desde hace cinco años.