Salvador Flores Durán
Oaxaca.- El Síndico Municipal de Santiago Lachiguiri, Raymundo Cortés Suárez, pidió al gobernador electo, Alejandro Murat Hinojosa, que en su gestión apoye a los productores de café, luego de que la plaga de la roya provocó una crisis de pobreza en todo el estado, por la caída de la producción.
Dijo que en ese municipio mixe-zapoteco del Istmo de Tehuantepec, la producción cafetalera cayó hasta más de un 90 por ciento, lo que hizo que se agudizara la pobreza extrema y la emigración de campesinos y jóvenes.
Acusó que el gobierno estatal, la Sedafpa y la Sagarpa, hicieron caso omiso de este grave problema que afectó a miles de familias indígenas que vivían de la producción cafetalera, lo que se sumó a la caída de los precios del aromático, y dejaron que el problema afectara a todas las zonas productoras, donde la pobreza de los indígenas se agudizó.
A punto de concluir su encargo como Síndico Municipal de Santiago Lachiguiri, Cortés Suárez acusó que “actualmente la producción está por los suelos, porque la roya acabó con todo. En el gobierno municipal trabajamos y se han bajado cinco proyectos para viveros de café colombiano y Costa Rica, variedades resistentes a la roya. Si Dios quiere, en dos o tres años los paisanos dela comunidad volverán al trabajo”.
En Lachiguiri, un pueblo indígena enclavado en una cordillera montañosa, más del 90 por ciento de los pobladores se dedicaban al café de un total de más de siete mil habitantes. “Ahorita se dedican al maíz, al frijol, la mayoría está trabajando en la construcción de la supercarretera, como jornaleros porque dejaron el campo”.
Cortés Suárez señaló que la producción del aromático se cayó totalmente, “apenas se saca para el autoconsumo porque para cosechar ya no se pudo. Hace dos años la mayoría de las personas tenía como mínimouna tonelada de producción y ahorita no sacan ni 50 kilos. En dos años se cayó al producción por completo”.
Los principales ingresos de las familias indígenas en ese municipio, como en muchas otras regiones de Oaxaca, eran por la venta de café, y “se ha recrudecido al pobreza. La gente se ha mantenido por los trabajos en la supercarretera, en la construcción la gente se va acomodando y en otros los hijos han emigrado para trabajar y mantener a sus familias”.
Dijo que cuando el precio del café estaba en su apogeo, con una toneladadel grano una familia podía tener ingresos por 50 mil pesos, pero “ahorita por la crisis bajó la producción y también bajó mucho el precio del café bajó, a 20 o 30 pesos el kilo. Así lo compran, pero también se ha ajustado un poco el precio por que los productores se han agrupado”.
En Lachiguiri operan dos organizaciones que agrupan a unos 150 productores indígenas cada una, la Coordinadora Estatal de Productores de Café de Oaxaca (CEPCO), que tuvo su auge durante el sexenio de Diódoro Carrasco Altamirano agrupa a unos 50, y la Unión de Comunidades de la Región del Istmo (Uciri),que agrupa a unos 100 productores.
La Uciri es la organización cafetalera más antigua de Oaxaca, fundada en 1982, con 17 comunidades cafetaleras interesadas en mejorar las condiciones de producción y venta del café y el bienestar campesino, con ayuda de la diócesis de Tehuantepec y de ONGs europeas. Esta organización actualmente agrupa a dos 600 miembros de 56 comunidades zapotecas y mixtecos del centro y norte del Istmo, chontales del sur, Chatinos de la Costa y Mixes de la parte media y alta.
Cortés Suárez explicó que la mayoría de los cafetaleros son productores libres que venden a los “coyotes, al mejor postor y ya organizados obtienen créditos, apoyos vía proyectos, en esta temporada obtienen esos créditos y otros beneficios”.
Durante la crisis del café que se inició hace dos años “no tuvimos ningún tipo de apoyo de la Sagarpa ni de la Sedafpa. Sí llegaron a Lachiguiri, sí hicieron su censo pero hasta ahí nada más. La Sagarpa envió dos bombitas para todo el municipio, para combatir la plaga, cosa que es imposible atender con dos bombitas y unos kilos de líquido”, acusó.
Muchos jóvenes han tenido que emigrar en estos dos años para buscar empleos en otros lugares ante la grave omisión delos gobiernos federal y estatal para frenarla roya del café, y en Lachiguiri “la totalidad de las plantas están perdidas, porque las familias dejaron de atenderlas”.
Dijo que unos 300 productores y las autoridades municipales se organizaron y demandaron a la CDI su inclusión en un programa de apoyo, con lo que se están volviendo a limpiar los terrenos y a reforestar con nuevas plantas resistentes a la roya.
“Somos optimistas y calculamos que en unos dos años tengan cosecha de café. El gobierno del estado dejó en el abandono a los productores del café, nosotros tocamos puertas y ahorita nos apoyaron. Hay unos 27 municipios que son apoyados. Nosotros empezamos con dos viveros de platas de café resistentes a la roya, y ya se aumentaron a cuatro. Empezamos en Tierno Coyul y Nativitas Coatlán”, indicó.
Dijo que “toda la gente le echó ganas y se duplicó el presupuesto del año pasado, logramos tener como 300 mil pesos por proyecto y ahora se está duplicando, porque aumentó la pobreza,estábamos estancados”.
Otra problema que ha agravado la situación es que la constructora de la supercarretera al Istmo de Tehuantepec, empezó a despedir personal, “lamentablemente en estos días empezaron a bloquear otros municipios y pueblos, desconozco los motivos. Las máquinas están paradas, y poco a poco estaba cortando al personal. Estaban contratados más de 300 jóvenes y señores. La autopista está parada por el bloqueo de San Juan Lachixila y Santiago Quiavicuzas.
De acuerdo con el Plan de Desarrollo Municipal 2011- 2013, la producción de café cereza a nivel estatal es de 156 mil 852 toneladas al año, por lo que Oaxaca ocupaba el cuartolugar a nivel nacional, mientras que la producción de la región del Istmo era de 13 mil 825toneladas al año.
Lachiguiriproducía 12 mil 30 toneladas al año, lo que representa el 9.8 por ciento de laproducción estatal y el 87 por ciento de la producción de la región del istmo. “Se puede decir que laactividad del cultivo de café es rentable si comparamos nuestra producción con los municipiosbajos; en donde por una hectárea de maíz se obtiene un rendimiento aproximado de 800 kilogramos por hectárea, mientras que en café es de 2.5 toneladas por hectárea”.
En ese año se sembraron en Lachiguiri cuatro mil 812 hectáreas de café, logrando una producción de cinco mil 261 toneladas y cada tonelada costaba cuatro mil 955 pesos, por lo que los ingresos en el municipio por el cultivo de café fueron en ese año de más de 26 millones de pesos.
Hoy, la pobreza de los indígenas se profundizó por la omisión total de los gobiernos federal y estatal en la atención a la roya del café.