Salvador Flores Durán
Oaxaca.- La dirigente del Grupo de Estudios Sobre la Mujer (Gesmujer), Ximena Avellaneda, demandó que las autoridades intervengan, actúen y apliquen la ley en el caso de la niña que fue violada por un religioso evangélico en la agencia de Santiago Quetzalapa, del municipio de San Pedro Sochiapam, ubicado en la región de la Cañada, luego de que el agresor pagó una “multa” de dos cartones de cerveza como “reparación del daño”.
En entrevista dijo que este caso “es verdaderamente escalofriante, porque nuevamente pone en evidencia la ignorancia y el machismo, y desafortunadamente es otro caso más donde los usos y costumbres le dan tal valor a las mujeres y las niñas que se equipara con dos cartones de cervezas”.
Avellaneda indicó que “es un caso paradigmático porque hablamos de una niña de 8 años, y a quién le puede pasar por la mente que seduzca a un hombre. Además eso no justifica una violación”, señaló, luego de que la esposa del hombre acusado lo justificó asegurando que la niña había seducido a su esposo.
La dirigente feminista explicó que se trata de un viejo argumento “que las mujeres son violadas porque ellas lo provocan, es victimizar a la víctima, tratar de agregarle como más culpas” y justificar las violaciones como si por ello fueran aceptables o porque se argumenta que las víctimas fueron las que provocaron la agresión.
Aseguró que en Oaxaca la violencia contra las mujeres es generalizada “creo que sería injusto decir que es exclusivo o es más común en las comunidades indígenas” y planteó que estos usos y costumbres en los que se victimiza a las mujeres también se dan en las ciudades donde “es un uso y costumbre que una joven puede ser agredida”.
Dijo que como este caso, hay muchísimos más que no se llegan a conocer de manera pública y acusó que “estamos lejos de que las autoridades respondan de una manera conocedora y responsable por una crimen de esta magnitud, por la violación de una niña”.
Avellaneda indicó que hasta ahora se desconoce si las autoridades están interviniendo, si la Fiscalía está investigando o no o si el DIF acudió a auxiliar a la niña, para ofrecer defensa o dar seguimiento al caso, porque “esta es tarea de las autoridades que deben actuar de manera rápida”.
Dijo que en Oaxaca la violencia contra las mujeres es un problema muy amplio y con muchas aristas que tienen que ver con la prevención “que todos los hombres y mujeres sepan que no hay razón que amerite una violación, de una mujer mayor, de una joven, y mucho menos de una niña. Que desde la sociedad estemos educados y nos demos cuenta, hombres y mujeres, que nada amerita una violación ni el homicidio como el que sucedió también en la región de la Cañada”.
Las autoridades de la agencia de Santiago Quetzalapa multaron con dos cartones de cerveza al presunto violador de la niña de 8 años, luego de que el padre de la víctima denunció el abuso sexual ocurrido el 12 de septiembre en un paraje de esa localidad.
Damián Albino Sánchez, agente municipal de Santiago Quetzalapa, recibió la queja del ataque sexual, por el padre de la menor, y éste denunció que el agente impuso una multa en especie de dos cartones de cerveza al presunto atacante, Cirilo Jerónimo Cruz, de 55 años, pastor de la iglesia evangélica de la comunidad.
Agregó que la autoridad auxiliar desestimó el delito cometido por el pastor. Al conocer la multa que Albino Sánchez habría de imponerle al agresor, el papá de la víctima optó por retirarse.
De acuerdo con la nota de Ruta 135, los familiares agraviados se dirigieron al domicilio del atacante, pero fueron recibidos por la esposa, quien justificó la actuación del pastor evangélico con el argumento de que fue “seducido” por la pequeña.
La menor fue valorada por personal médico de los Servicios de Salud en San Pedro Sochiapam, quienes comprobaron la violación; después fue canalizada al Hospital Regional de San Juan Bautista Cuicatlán, en la misma región. Los familiares de la niña refirieron que el agresor se desplaza impunemente por la población de Santiago Quetzalapa, sin haber recibido ningún castigo por el delito cometido.