Oaxaca.- Mauricio Paredes, reconocido autor chileno de literatura infantil, participó la mañana de este miércoles en un encuentro con niños oaxaqueños, en la 36 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO), como parte del Programa Infantil y Juvenil de esta fiesta de las letras.
El autor de libros como “¡Ay, cuánto me quiero!” y “Don Macanudo” leyó para los infantes algunos de sus cuentos más conocidos. Previo a esta lectura, Paredes conversó un poco sobre el oficio de escritor infantil, el cual ejerce pese a ser ingeniero de profesión.
“Desde niño me gustaban los libros infantiles. Hubo muy buenos maestros que me apoyaron y me dijeron que no dejara lo de la escritura porque se me daba muy bien. Esos buenos maestros y esas buenas lecturas y el apoyo de mi familia me llevaron en el año 2001 a probar. Ahora tengo libro publicados en toda Hispanoamérica y estoy muy contento”, relató el autor.
Sobre su estilo, Paredes refirió “me han dicho que mi literatura es un poco irreverente, pero más que nada usa el humor como ingrediente esencial. Por una parte está la risa del chiste pero también el humor como disposición hacia la vida. El talante de plantarse a la vida de una manera optimista porque las desgracias van a ocurrir sí o sí”.
Agregó, “yo vivo en un país donde los terremotos, los tsunamis los cataclismos son cosa de todos los años, entonces hay esa resiliencia de levantarse y reírse de las propias dificultades. Esa disposición positiva hacia la vida es la esencia de mis libros y yo creo que los niños lo captan muy bien, y con base en el humor planteas otros temas”.
Sobre la forma adecuada de acercarse al público infantil desde la literatura, el autor apuntó que “una de las premisas que tengo es no pensar en los niños cuando escribo. Suena a una paradoja pero trato de nunca adoctrinar, de no escribir como papá sino como niño de ocho, nueve, diez años, como era Mauricio Paredes cuando estaba en el colegio”.
“Yo siento que eso tiene mucho que ver con el respeto hacia el lector, uno inteligente, crítico, que pueden entender sus textos y leer entre líneas. Por otra parte sí hay restricciones de lenguaje, si usas uno demasiado completo el niño no va a entender. Pero tampoco caer en el facilismo de tener un lenguaje demasiado básico”, continuó el chileno.
Paredes ve con buenos ojos la diversificación actual de la literatura infantil, pues “una persona que lee desde su infancia desarrolla un sentido crítico, desarrolla opiniones propias, pueden argumentar. Entonces cuando llegan a la adolescencia o juventud y les dicen ‘únete al partido tal o usa tal marca de ropa o escucha tal tipo de música’ ellos pueden tomar sus decisiones personales, no con base en lo que la masa dice”.
Mauricio Paredes, además de escribir, se dedica a la investigación y difusión de la literatura infantil. Ha sido profesor universitario, colaborador del Ministerio de Educación, guionista de televisión y presidente de la Corporación del libro infantil IBBY Chile. Realiza presentaciones para niños y conferencias para especialistas. Ha realizado más de mil presentaciones en varios países.