Joel Saucedo
Un poderoso actor ha saltado a la palestra política en los primeros días de este convulsionado arranque del 2017.
Precisamente el 6 de enero, Día de los Reyes Magos, irrumpió en las redes sociales como candidato a la Presidencia de México para el 2018.
Se trata de Carlos Slim, el hombre más rico del país y uno de los más acaudalados del mundo.
¿Hay alguna intencionalidad política detrás de este movimiento? Aparentemente no, pero finalmente es una acción política.
La propuesta surge en un momento de crispación social por el incremento al precio de las gasolinas.
El origen de su impulso indica que de ser candidato, lo sería por la vía independiente.
Bajo esta tesitura, superaría con creces a los destapados independientes como Gerardo Fernández Noroña y Pedro Ferriz de Con.
¿Pero realmente podría competir contra los poderosos partidos PRI, PAN y PRD, que gozan de una clientela política colosal?
¿El empresario le haría contrapeso al más popular de los aspirantes a la Presidencia, como lo es Andrés Manuel López Obrador?
Es difícil prever lo que podría suceder, pues la maquinaria de los partidos políticos mencionados está más que aceitada en la adelantada carrera presidencial.
Cierto es que se trata de un influyente hombre de negocios y dinero no le faltaría para su campaña, salvo los topes que le pudiera imponer la autoridad electoral.
El vídeo destape resalta las virtudes del magnate, sobre todo como un rival capaz de enfrentar a Donald Trump.
Incluso asegura que hará más por México, pues sus fundaciones apoyan la educación, la salud, la nutrición, la justicia y el desarrollo humano.
No tiene partido político, ni mayores compromisos que lo pudieran atar en un momento dado.
Sin embargo, falta saber qué opina el rico empresario sobre esta campaña a su favor impulsada principalmente en Twitter y Facebook.
También falta saber lo que piensan los principales dirigentes políticos, empresarios, intelectuales, jerarcas religiosos y demás representantes de la sociedad.
Ahí está Carlos Slim, en estos momentos de hartazgo social por el alza a las gasolinas, la corrupción y la galopante inseguridad.
PROSPECCIÓN… El gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto y los sectores productivos del país, firmaron Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar, cuyo propósito es evitar alzas injustificadas de precios con motivo del aumento a la gasolina y el diésel. Además, el objetivo del pacto es proteger la economía familiar, fomentar las inversiones y el empleo, preservar la estabilidad económica, fortalecer la cultura de la legalidad y el Estado de derecho, así como el compromiso de darle seguimiento y evaluar el acuerdo.
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