* La activista por los derechos de los animales Ireri Carranza López sufrió una paliza de un vecino cuando buscaba a una de sus mascotas
Por Juliana Fregoso
La activista mexicana por la defensa de los animales Ireri Carranza López fue golpeada por un vecino cuando su perro se metió a su casa y ella trató de defenderlo. Las autoridades aseguran que fue una riña vecinal, pero ella busca que el hecho se tipifique como delito contra la mujer, ante las heridas que sufrió.
En realidad, el episodio comenzó con un gato. A Ireri Carranza López, de la Unión de Protectores de Animales por una Vida Digna (UPA), se había perdió el suyo en la colonia Irrigación en la capital. Lo fue a buscar a una casa vecina, cuyo dueño le gritó molesto desde la ventana que no estaba ahí.
De regreso, él estaba en la puerta y se le acercó para pedirle disculpas por haberlo incomodado, pero el perro de Ireri se metió a su casa. El vecino lo pateó, ella le reclamó y la respuesta fue un puñetazo en la cara que le provocó lesiones en la boca. Del golpe la tiro al piso, donde la empezó a patear.
“Me cambió mi cara, me dejó el lado izquierdo caído, me abrió 3 centímetros el labio. Cuando agredió a mi perro le dije que era una persona terrible y me agarró al golpes”, dijo la activista a Infobae.
A la agresión se sumó la hija del vecino, una mujer de 33 años, quien también golpeó a la activista con la rodilla. “Antes de hacerlo me preguntó si quería más”.
Afirma que al llegar al Ministerio Público a denunciar los hechos, la tuvieron 8 horas sin recibir atención médica a pesar de que llegó sangrando, después la amenazaron con detenerla porque su perro no llevaba correa –a pesar de que es sólo una falta administrativa.
“Me trataron como una estúpida, como la loquita que cuida a los animales, que defiende a los perritos, hasta que no llegaron vecinos que vieron todo y empezaron a presionar”, agregó.
“Si los vecinos no lo detienen, me mata. No puedo mover los dedos de la mano derecha, no puedo mover bien el cuello”, dijo.
La activista insistió en que no se trata de una riña vecinal como lo tipificó la autoridad sino de un delito de género, a pesar de que alcanza fianza, “pero lo que quiero es sentar un precedente de que no se puede agredir así nada más a una mujer”.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), señala que en la Ciudad de México 72 de cada 100 mujeres han recibido agresiones por parte de su pareja o de alguna otra persona.
De acuerdo con la causa de agresión dirigida hacia la población femenina, 41 de cada 100 mujeres fueron atacadas por disparo con arma de fuego, 17 de cada 100 fueron agredidas por ahorcamiento, estrangulación y sofocación, y 18 de cada 100 fueron atacadas con algún objeto cortante y el resto (24.1%) fueron agredidas con otros medios.