Ignacio Castro
Peña Nieto y Trump sostuvieron hoy una conversación telefónica.
El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, y el Presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump, sostuvieron una llamada telefónica de una hora, hoy por la mañana, en la que entablaron “una conversación constructiva y productiva en torno a la relación bilateral entre ambos países”.
Así lo informó la Presidencia de la República, la cual detalló, en un comunicado, que en la charla se incluyeron “el tema del déficit comercial de Estados Unidos de América con México, la importancia de la amistad entre nuestras naciones, y la necesidad de que nuestros países trabajen juntos para detener el tráfico de drogas y el flujo ilegal de armas”.
“Con respecto al pago del muro fronterizo, ambos Presidentes reconocieron sus claras y muy públicas diferencias de posición en este tema tan sensible, y acordaron resolver estas diferencias como parte de una discusión integral de todos los aspectos de la relación bilateral”. Además, “convinieron por ahora ya no hablar públicamente de este controversial tema”, de acuerdo al comunicado oficial.
También precisa que “ambos Presidentes han instruido a sus equipos a continuar el diálogo para fortalecer esta importante relación estratégica y económica de manera constructiva”.
Esto luego de que el pasado jueves el presidente Peña Nieto dio el primer paso ante Donald Trump al cancelar la reunión que tendría el 31 de enero en Washington con el presidente estadounidense, luego de que este le advirtió que si México no pensaba pagar el muro entre los dos países que ya anunció que se construirá, mejor ni fuera a dicho encuentro.
Raudo y veloz, el mismo jueves Peña Nieto informó vía twitter que había comunicado al magnate presidencial la cancelación del encuentro, con lo que inmediatamente obtuvo el respaldo y apoyo de la clase política, sin importar la filiación partidista, así como de los sectores empresarial y económico de nuestra nación.
Si bien esto en la práctica, de parte de Trump, ya es una guerra política, comercial y económica contra México, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal dejó las cosas bien clarasal señalar que por este diferendo México no va a romper relaciones con Estados Unidos ni se retirarán embajadores, y que se mantiene la comunicación para tratar de llegar a un acuerdo con el gobierno de Trump.
Esta afirmación del funcionario federal fue en realidad un llamado a la cordura dirigido al millonario presidencial, y una mano extendida, lo cual es positivo, pues si bien Trump está loco,en alguna de las partes debe imperar la prudencia y el buen trato, que es el caso de México, en beneficio de nuestro pueblo, aunque Guajardo sostiene que no hay una guerra comercial entre los dos países.
Al parecer la sensata postura del gobierno mexicano hizo reflexionar a Trump, además que la cancelación del viaje a Washington le ganó bonos al presidente Peña, pues era un reclamo de los más importantes líderes de la oposición nacional, como Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador, así como una petición de militantes destacados de prácticamente todos los partidos políticos, incluido el PRI.
Así, en cuanto Peña Nieto informó de la cancelación del mencionado viaje, los mensajes de apoyo no se hicieron esperar, como el que emitió vía twitter el ex presidente nacional del PRI y una de las figuras priistas más respetadas, Manlio Fabio Beltrones, quien expresó: “Saludo y celebro la decisión del presidente @EPN de cancelar su visita a Washington. En política se puede negociar todo, menos la dignidad”.
Incluso, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, al encabezar la conferencia del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, manifestó su respaldo al Ejecutivo Federal, y celebró la determinación del gobierno federal de llevar a cabo un ejercicio pleno de asistencia consular en favor de los connacionales.
Sin embargo, advirtió que los cambios en la política migratoria, económica y social de EU “deben ponernos en estado de alerta para denunciar y oponernos a expresiones de discriminación, misoginia, exclusión, racismo y xenofobia”.
González Pérez aseveró que el muro fronterizo es tan sólo una de las manifestaciones externas de un régimen, cuya forma de ejercer el poder implicará aparentemente la promoción de expresiones que vulneran o desconocen los principios más elementales de dignidad de las personas.
Incluso, el apoyo también vino del presidente de Bolivia, Evo Morales, quien en su cuenta de twitter hizo un llamado “a nuestros Hnos mexicanos a mirar más al sur; construir juntos unidad en base a nuestra identidad latinoamericana y caribeña”.
Ya con esto me despido
En este contexto es válido recordar una frase del general Lázaro Cárdenas, aquel que se enfrentó al poderío estadounidense y de otros países al nacionalizar el petróleo y la electricidad:
“No basta la buena intención del mandatario, es indispensable el factor colectivo que representan los trabajadores. Al pueblo de México ya no lo sugestionan las frases huecas: libertad de conciencia, libertad económica”.
