*The New York Times obtuvo la lista de 44 preguntas que el fiscal especial de EU, Robert Mueller, tiene preparadas para cuestionar al presidente Trump sobre la intromisión de Rusia en las elecciones de 2016
Washington 1 de mayo de 2018.- El fiscal estadounidense que investiga la trama rusa, Robert Mueller, tiene cerca de medio centenar de preguntas preparadas para interrogar al presidente, Donald Trump, según un cuestionario filtrado este lunes a The New York Times.
El cuestionario, con 44 preguntas, fue entregado hace unos días por el equipo de Mueller a los abogados de Trump, que todavía sopesan si el presidente debe someterse o no al interrogatorio del fiscal especial.
Las cuestiones abarcan un abanico de asuntos que Mueller ha tocado en su investigación, que este mes de mayo cumple un año, aunque muestra especial interés en las decisiones de Trump que habrían podido incurrir en obstrucción a la justicia.
Por ejemplo, una de las preguntas indaga por qué Trump sondeó a su exasesor de seguridad nacional Michael Flynn con un indulto cuando este se planteó colaborar con la investigación.
Mueller también quiere saber cuánto sabía Trump de los contactos que Flynn estableció con el exembajador ruso en Washington Sergey Kislyak durante el periodo de transición presidencial, que en última instancia provocaron su dimisión como asesor en febrero de 2017.
La lista de preguntas también abarca los motivos de Trump para cesar al director del FBI James Comey hace un año así como los contactos que tuvo su la campaña con los rusos.
La mayoría de preguntas buscan los motivos de los encuentros que Trump propició con Comey en sus primeros meses en la Casa Blanca, aunque Mueller también quiere saber la opinión del presidente sobre investigaciones y declaraciones del entonces director del FBI.
Mueller también quiere que Trump le aclare el objetivo de algunos de sus más polémicos tuits, como uno del 12 de mayo de 2017 en el que insinuaba que había grabado sus conversaciones con Comey.
Más allá de Flynn y Comey, Mueller quiere indagar sobre las presiones que recibió el fiscal general, Jeff Sessions, cuando decidió apartarse de la investigación sobre la trama rusa, una jugada que le ha costado numerosas críticas de Trump.
Asimismo, Mueller quiere indagar sobre un encuentro de uno de los hijos de Trump con una abogada rusa para obtener información sobre la candidata demócrata, Hillary Clinton, y sobre los negocios que el ahora presidente entabló durante un viaje en 2013 a Moscú.
Una de las preguntas hace referencia a las posibles conversaciones de Trump con respecto a “cualquier reunión con el sr. (Vladimir) Putin”, el presidente de Rusia. Y otra plantea qué sabía el presidente sobre un posible intento de su yerno, Jared Kushner, de establecer un canal con Rusia antes de su toma de posesión.
Uno de los abogados del presidente, Jay Sekulow, declinó realizar comentarios a The Associated Press el lunes en la noche, así como el letrado de la Casa Blanca, Ty Cobb.
Las preguntas también se refieren a la intromisión rusa y a si el equipo de campaña de Trump se coordinó de algún modo con el Kremlin. En una de las cuestiones obtenidas por el Times, Mueller pregunta si Trump sabía que miembros de su equipo, incluyendo el exdirector de campaña Paul Manafort, contactaron con Moscú.
“¿Qué conocimiento tenía de cualquier contacto de sucampaña con Rusia sobre una posible asistencia a la campaña?” o “¿Durante la campaña, qué sabía usted sobre el ‘hackeo’ ruso, el uso de redes sociales u otras actividades dirigidas a ayudar la campaña?”, son algunas de las preguntas.
Mueller ha presentado varios cargos contra Manafort, pero ninguno por delitos relacionados con la interferencia rusa en la campaña de los comicios presidenciales de 2016, un tema con el que Manafort ha negado tener algo que ver.
El listado del equipo de Mueller aborda además los negocios de Trump y sus conversaciones con su abogado personal, Michael Cohen, sobre un posible acuerdo inmobiliario en la capital rusa. Las gestiones empresariales de Cohen forman parte de una investigación separada del FBI.
Trump estudiaba hace algunas semanas con su equipo legal si dejarse interrogar por Mueller, pero esa posibilidad pareció alejarse como consecuencia del registro de la oficina de su abogado personal, Michael Cohen, a principios de mes.
El presidente calificó ese registro de “vergonzoso” y de “caza de brujas” en su contra orquestada por la investigación rusa.
Aunque el equipo de Mueller ha indicado a los abogados de Trump que él no está considerado un objetivo, los investigadores siguen interesados en determinar si los actos del dirigente constituyeron obstrucción a la justicia y quieren interrogarlo sobre varios episodios de su presidencia. Los letrados quieren cerrar la pesquisa lo antes posible, pero no hay un acuerdo sobre cómo hacerlo.
