Salvador Flores Durán
Oaxaca.- Al menos 40 edificaciones que son consideradas joyas históricas y arquitectónicas, están a punto de colapsar, aseguró la restauradora Flor María Gutiérrez Cantón, quien aseguró que el INAH y las autoridades no pueden hacer nada porque se trata de inmuebles de propiedad privada.
La especialista en rescate de inmuebles antiguos, explicó que el deterioro arquitectónico y del patrimonio histórico del centro de la ciudad capital es patente y visible, “lo podemos ver en todos los inmuebles que se están colapsando y que no tienen un mantenimiento adecuado por los propietarios. Eso aunado a que los propietarios se han ido del centro por todos estos conflictos que han sucedido entonces tenemos un gran número de inmueble que están en el abandono”.
Dijo que de acuerdo con información del Ayuntamiento capitalino hay cuarenta inmuebles que están en total deterioro que ya están a punto de colapsar, “es más ya no tienen cubiertas, los muros están expuestos, con grietas y fracturas, con un desprendimiento de materiales increíble. Ya no pueden utilizarse para la habitación hay que restituirlos y eso hace también que nos vayamos olvidando del patrimonio”, arquitectónico de Oaxaca.
Explicó que se necesita el apoyo de todos porque en el deterioro de los inmuebles tienen que ver muchos factores, son propiedad privada y en algunos casos totalmente deteriorados porque los propietarios los abandonan al no poder cumplir con los requisitos que establece el Instituto Nacional de Antropología e Historia para su rehabilitación.
En otros casos los dueños ya fallecieron y las propiedad está intestada, o los dejaron en herencia pero no tienen dinero para hacer trabajos de recuperación.
“Entonces pues no hay quien los intervenga, además, como Centro Histórico debemos considerar que se debe hacer un plan de manejo y un plan para poder trabajar todos los inmuebles en conjunto con los ciudadanos”, explicó.
Dijo que la Dirección del Patrimonio del Centro Histórico se dedica a dar autorizaciones y a que el reglamento del Centro Histórico se aplique, mientras que el INAH tampoco tiene un programa para rehabilitar inmuebles históricos.
Gutiérrez Cantón dijo que hay una área del INAH que ha trabajado con los dueños de los inmuebles deteriorados, pero a través de asesorías para hacer algunos proyectos en conjunto con los alumnos de arquitectura, pero se trata de esfuerzos aislados. Además, dijo que los edificios públicos del Centro Histórico, especialmente los construidos con cantera verde, han sido afectados durante muchos años por los conflictos sociales que ha vivido Oaxaca.
“Es igual de gravoso. Ahí se estaría viendo que el abandono tiene que ver con que no hay un mantenimiento no constante y es parte de lo que tiene que hacer el gobierno, en la medida que tengan el ánimo de intervenirlos, de conservarlo de tratarlos bien, pues van a estar en mejores condiciones”, señaló.
Dijo que las edificaciones que están a punto de colapsar son principalmente habitacionales, “entonces vamos a tener un vacío en cuanto a la concepción de la habitación, cómo era en los siglos anteriores o la forma de construir. Ese es el valor que estamos perdiendo, el conocimiento de los sistemas constructivos que se usaban y como los elaboraban. Vamos a perder una parte de nuestra historia y de cómo ha evolucionado la ciudad”.
Dijo que la mayoría de estas edificaciones son de menores dimensiones que las ubicadas en el primer cuadro de la ciudad, “estamos perdiendo la arquitectura vernácula, de casas que no son tan ostentosa pero sus características de construcción son bastantes buenas y benéficas para los habitantes”.
Se trata de casas construidas con adobe que no tienen normalmente grandes alturas ni grandes dimensiones, y destacó la casa ubicada enfrente del edificio de correos en la Alameda Central, “es un inmueble bastante representativo, comprende casi un cuarto de manzana, con muros de adobe que todavía conserva la viguería”.
Además, en el interior conserva todas las molduras en la parte de arriba en los ventanales y su herrería es forjada. La casa perteneció a una señora que murió y se desconoce si el inmuebles está intestado o quién es el propietario.
Señaló que en muchos casos la hierba conocida como “mala mujer” o de San Pablo, es sumamente dañina para las edificaciones abandonadas del Centro Histórico, ya que sus raíces penetran en techos, paredes y muros, lo que provoca el derrumbe de las mismas. “Ahí se ve el abandono de las instituciones, tanto del INAH como del Centro Histórico, porque no hay ningún tipo de exhorto para que se elimine esas plantas”.
Dijo que la Dirección de Monumentos del INAH es el único organismo que ha trabajado los proyectos para la intervención y los entregan a los propietario para que hagan la intervención.
Respecto a las obras que se realizan en la capital del estado en las que se ha sustituido la cantera verde por otro tipo de materiales, explicó que se están uniformizando los centros históricos de acuerdo con los parámetros de la UNESCO, que establecen que deben de tener un determinado tipo de piso o un determinado tipo de luminarias, de señalética, “esto ha hecho que las intervenciones en los Centros Históricos sean muy semejantes, sin tomar en consideración que cada uno tiene características particulares, totalmente diferentes”.
Dijo que como los recursos destinados a esos programas ya vienen etiquetados es muy difícil que los cambien y lo que sucede es lo que vemos en la ciudad capital, “ya todos tiene su ciclovía, tienen piedra de monte. Quien dicta esas normas son los programas que salen a través de la UNESCO”.
La restauradora explicó que el centro de Oaxaca tenía calles de cantera en lo que se llamaba el Camino real, hoy Independencia, la que llegaba hasta la actual avenida Ferrocarril, y la calle de García Vigil que venía desde San Felipe del Agua y tenía una acequia a la orilla de la calle de cantera, un canal que transportaba agua limpia para el uso de la población.
El agua era traída desde San Felipe por el acueducto, del cual aún se conservan restos en lagunas partes de la ciudad, “lo han cortado porque necesitan acceder a sus inmuebles o necesitan hacer su cochera, principalmente en la parte de San Felipe y en Xochimilco todavía se conservan algunas partes”.
Dijo que la antigua cantera usada en las edificaciones viejas ha sido cambiada y se desconoce quién se quedó con ella. “El detalle es que la cantera ya no es la misma ya no tiene las mismas características de resistencia y durabilidad”.
Señaló que actualmente pueden usar cantera pero es más porosa y tiende a desquebrajarse, se deteriora más rápido y se pulveriza.
El destino de la vieja cantera que ha sido sustituida en diversas obras realizadas por el gobierno estatal y municipal, se desconoce, “pues quien sabe. Eso es un enigma yo creo que muchas personas no ven el valor que tiene ese material”.
“El amor a la ciudad es algo que lo trae uno adentro, eso no se lo puede uno poner a una persona, a un funcionario”, señaló.