Oaxaca.- Otro caso de éxito del Servicio de Emergencias 9-1-1 fue reportado por la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), al lograrse la liberación de una persona que había sido secuestrada en Santa Cruz Xoxocotlán, gracias a la coordinación técnica, táctica y estratégica con las corporaciones policiales.

De acuerdo a información del Centro de Control, Comando y Comunicación (C4), el reporte fue recibido por el 9-1-1 el pasado lunes, alrededor de las 09:20 horas, ya que la víctima contactó a un familiar en el vecino estado de Puebla, cuya denuncia a los servicios de emergencia de esta entidad fue la pieza clave que detonó la movilización policial en el territorio oaxaqueño, ya que ambos C4 colaboraron para lograr la liberación.

Tras la llamada recibida y la claridad en los datos proporcionados, se logró establecer un despliegue operativo en el que participaron la Policía Estatal y el Grupo Especial Antisecuestros de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), con el apoyo del Servicio de Denuncia Anónima de la Policía Federal, quien recibió en primera instancia la transferencia de auxilio.

Gracias a la tecnología del C4, se logró establecer el punto de origen de la llamada en inmediaciones del fraccionamiento Rancho Aguayo, en Santa Cruz Xoxocotlán; sin embargo de manera sorpresiva a las 09:50 horas aproximadamente, al Servicio de Emergencias 9-1-1, se recibió la llamada de la víctima que se encontraba privada de su libertad, mencionando que logró escaparse abundando además sobre las características físicas de su captor y del lugar donde la tenía secuestrada.

De inmediato las unidades de auxilio que se encontraban dando seguimiento al reporte y cerca del lugar, se trasladaron a ese sitio, realizando el cateo en el domicilio del sujeto ubicado en esa misma unidad habitacional, logrando la captura del imputado por los delitos de privación ilegal de la libertad, violación y robo en agravio de una femenina de 40 años de edad.

Se trata de Fernando J. R. R., de 28 años de edad, puesto a disposición de las autoridades ministeriales competentes, por elementos del Grupo Especial de Antisecuestros.

El uso responsable y consciente de los servicios telefónicos de emergencia, permitirá a las instituciones de seguridad pública, cumplir con su misión de Proteger y Servir de manera óptima a la ciudadanía, tal como ocurrió en este caso.