*Este espacio tiene la finalidad de propiciar un punto de encuentro entre personas, tradiciones, artesanía, diseño y arte contemporáneo
Oaxaca, 20 de abril.- Hace siete años, en el corazón del Centro Histórico de Oaxaca, una vieja casona del siglo XVIII restaurada por la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca (FAHHO) reabrió sus puertas para hospedar el Museo Textil de Oaxaca (MTO), un espacio para las artes textiles que se ha sumado a la riqueza cultural del estado.
Héctor Meneses, director del MTO, recodó que desde su creación el museo se concibió como “un centro de intercambio, reflexión y promoción del arte textil, no sólo de Oaxaca sino de comparación y contraste con el resto de México y del mundo, a partir de ello, a través de las exposiciones, talleres y conferencias, lograr un diálogo para reflexionar sobre los materiales, las técnicas, los significados y los cursos de los grandes textiles”.
Para el especialista, esta serie de actividades que el museo realiza permite conocer qué existe, qué ha evolucionado o desaparecido en el tema de los textiles, para después compartir la información con los visitantes.
A lo largo de sus primeros siete años, uno de los logros más sobresalientes del MTO han sido los vínculos culturales establecidos con las comunidades de Oaxaca, México y el Mundo.
El MTO abrió sus puertas el 19 de abril del 2008, convirtiéndose en el primer espacio cultural dedicado a los textiles. Desde entonces tiene la misión de ofrecer una visión amplia de los diseños, las técnicas y los procesos creativos para la elaboración de textiles de Oaxaca, de México y del mundo.
“Creemos que Oaxaca es uno de los lugares emblemáticos de la cultura del textil a lo largo de la historia, es un epicentro cultural del tejido, del bordado y merecía un museo, era casi natural que el primer museo textil en México abriera sus puertas en Oaxaca”, explicó Meneses.
La riqueza del MTO
El MTO alberga seis colecciones privadas extensas, con varios cientos de piezas en cada una de ellas, además de varias decenas de textiles que han sido adquiridas expresamente para el Museo.
Estas colecciones fueron donadas al MTO por María Isabel Grañén Porrúa, Madeline Humm de Mollet, Ernesto Cervantes, Alejandro de Ávila, Humberto Arellano Garza, Octavia Schoendube de Boehm. Aademás, la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, que ha patrocinado la adquisición y la restauración del edificio que lo alberga, sufraga los gastos de operación y ha aportado piezas de diversas partes del mundo que enriquecen el acervo.
“Las colecciones del museo son muy variadas. El acervo consta de más de 6 mil 500 piezas de Oaxaca y el mundo, y de esa manera las exposiciones se pueden complementar y contrastar similitudes, diferencias”.
También cuenta con un laboratorio de conservación donde “se atienden las piezas del acervo que necesitan una intervención. Tenemos numerosos talleres y conferencias donde artistas de diversas partes vienen a compartir sus conocimientos”, explicó Meneses.
Un poco de historia
El MTO está ubicado en el predio que fue parte de la huerta del antiguo convento de Santo Domingo Soriano, la segunda fundación dominica en América, establecida en el año de 1529, dedicada posteriormente a San Pablo, donde recibían la prédica en náhuatl, zapoteco y mixteco los vecinos indígenas de la ciudad.
A principios del siglo XVII, el convento sufrió graves daños debido a una serie de sismos y por tal motivo los dominicos, por iniciativa de Fray Francisco de Burgoa, el principal cronista e historiador del período virreinal en Oaxaca, se vieron forzados a rentar y luego a vender parte de sus terrenos para costear la reconstrucción.
Casa Antelo
El primer propietario de la subdivisión donde hoy se ubica el Museo fue don Miguel de Bustamante, quien construyó una sencilla casa de adobe de un solo piso. Posteriormente, entre 1764 y 1771, la propiedad fue comprada por el comerciante y hacendado español Ángel de Antelo y Bermúdez, quien hizo su fortuna exportando nada menos que grana, el tinte textil oaxaqueño por excelencia. Don Ángel demolió la casa de adobe para construir una típica casona barroca oaxaqueña de dos pisos, con la fachada de cantera verde y una hermosa puerta labrada. El inmueble fue conocido durante el siglo XVIII y XIX como la Casa Antelo.
Fue en el año 2006 cuando la Fundación Alfredo Harp Helú compró la casa Antelo y el exconvento de San Pablo como parte de un amplio proyecto de rescate arquitectónico del Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca para crear espacios de vocación cultural.
El festejo de los textiles
Para celebrar su séptimo aniversario el MTO ha organizado una serie de actividades artísticas. Este viernes, el festejo iniciará con la conferencia African blues: Mi vida en índigo, a cargo del artista Gasali O Adeyemo, quien hablará de cómo llega el textil a su vida. La charla se llevará a cabo en el Centro Cultural San Pablo en punto de las 18:00 horas.
El sábado y domingo, de 10 a 18 horas, en el primer patio del MTO se realizará la expoventa de textiles africanos de Gasali O Adeyemo. Para culminar el festejo, el domingo 19 de abril, de las 11:00 a las 13:00 horas, se ha preparado una celebración con nieves y música. Todos los eventos son de acceso gratuito.
El Museo Textil de Oaxaca se ubica en Hidalgo 917, en el Centro Histórico de Oaxaca.
