Salvador Flores Durán
Oaxaca.- El maestro en tecnología educativa por la Universidad de Salamanca, España, Rigoberto León Monterrubio, advirtió que la educación en Oaxaca está en “una zona prácticamente de caos y de guerra” y que el problema magisterial puede provocar respuestas violentas de diferentes sectores de la sociedad y generar un conflicto de gran trascendencia para el estado.

“La violencia es un riesgo para toda la ciudadanía oaxaqueña, porque nos pone en una crisis, de la que no nos percatamos, pero que nos daña en todos los aspectos de nuestra vida”, señaló.
En entrevista, el maestro en sicología educativa por la Escuela Normal Superior de México, dijo que esta situación nos causa “decepción de nuestro gremio magisterial, de nuestros gobernantes estatales, porque es clara la decepción que tenemos, y del mismo gobierno federal”.

“Creo que estamos en una situación muy crítica, en una situación en que la educación en Oaxaca está en una zona prácticamente de caos y de guerra. Y tenemos dos bandos que insisten y que están preocupados por el poder y no por la educación, y en medio queda la ciudadanía y los estudiantes, quedamos todos en medio del conflicto”, señaló.
El pedagogo recalcó que puede haber respuestas violentas de los sectores sociales decepcionados, y de los sectores más pobres y marginados, que encuentran la oportunidad de revelarse y demostrar su inconformidad contra el gobierno, “es la oportunidad que están aprovechando estos sectores, de la pobreza y marginación, que se une a los maestros porque saben que están en una lucha también y que no encuentran manera de organizarse, y aprovechan la organización magisterial”.
A la par de ello, “las otras clases sociales van a tomar partido, aunque estén menos organizados se van a organizar mejor para poder manifestar con mayor fuerza su descontento, como ya lo empiezan a hacer. Aunque es un sector menor tiene gran fuerza y creo que tomarán acciones mucho más organizadas y fortalecidas”.
La situación que se vive en el estado “puede ser también una manifestación del descontento, y que también está en otros estados semejantes a Oaxaca, pero creo que es un foco rojo por la situación que estamos viviendo en el país en general”.
Entrevistado luego de impartir un curso a maestros de la Facultad de Arquitectura 5 de Mayo de la UABJO, enfocado a la metodología didáctica y técnicas de aprendizaje, el maestro de educación básica egresado de la Escuela Normal, dijo que hay una gran decepción de la sociedad por este conflicto.
“Esto nos lleva a estar prácticamente en un estado de alerta y en un conflicto humanamente fuerte, que si no estamos conscientes y organizados, nos puede llevar a actuar de manera muy desorganizada y a generar un conflicto de gran trascendencia para todos los oaxaqueños”, explicó León Monterrubio.
Recalcó que a partir del problema sindical con el paro magisterial que inició el 15 de mayo en Oaxaca y con los bloqueos carreteros en los accesos a Oaxaca, “puede haber reacciones de violencia de diferentes sectores y de todos contra todos, ese es el gran riesgo, entonces creo que tenemos que pedir y exigir, hacer un llamado de atención y que todos pongan algo de su parte2 para resolver el problema.
El tema de fondo del conflicto, señaló es una lucha de poder “nadie quiere perder el control, el gobierno no quiere perder el control que tiene, y a la Sección 22 no le conviene ni le interesa perder el control que tiene sobre los maestros. Es un manejo de poder muy claro y nadie está dispuesto a ceder, y nadie está dispuesto a poner lo mejor de su parte para resolver el problema”.
Dijo que es muy preocupante que en 30 años de “lucha magisterial” varias generaciones hayan sufrido la ausencia de una educación de calidad en los salones de clase de todo el estado, “creo que el país entero debe reconocer que Oaxaca vive una situación de crisis muy profunda en la educación y que los paganos son los estudiantes. El resultado es que los empleadores tienen sus reservas para contratar a egresados de las universidades e instituciones de educación superior de la entidad”.

León Monterrubio indicó que este problema se ha presentado desde hace años, y las empresas no contratan a egresados de instituciones educativas oaxaqueñas, “seguimos en un conflicto muy reiterativo y seguimos viviendo en la marginación y profundizándola, y nadie hace algo con buena atención para resolverlo”.
Dijo que los maestros de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación “saben lo que les corresponde hacer, el asunto es que estén dispuestos a hacerlo. Entiendo que los maestros tienen la intención de dar una formación con conciencia social, y ellos saben lo que eso significa. Deberían estar muy interesados en trabajar de manera conjunta”.

Abundó que los maestros han perdido la oportunidad de crear su propia escuela y sus propios programas de formación y capacitación para desarrollar el pensamiento crítico y promover el pensamiento crítico en la enseñanza y en el trabajo con los niños.
Los maestros, señaló, incluso no necesitan libros de texto diferentes a los gratuitos, aún con la crítica que les podemos hacer a los libros se puede enseñar a los niños educación crítica a partir de esos textos, “como maestros tenemos que hacer que los niños aprendan a saber qué reconocen como verdad y como mentira”.
Dijo que las condiciones de marginación en Oaxaca son un reto para que la tarea educativa esté enfocada a resolver todas las consecuencias de la marginación, porque la formación de los maestros siempre ha sido planteada por los teóricos de la educación en el sentido del compromiso que deben tener los maestros con las comunidades, “de un trabajo más asentado con los problemas de las comunidades y poco a poco hemos perdido ese compromiso, por diversas razones”.
Dijo que tanto la propuesta de la Ley de Educación estatal, la reforma educativa del gobierno federal y lo que plantea la Sección 22 en el PTEO persiguen los mismos fines de “integrarse más a la comunidad, de interesarse más por ellas, de formarse y prepararse para manejar y conocer las costumbres e incluso hablar las lenguas delas comunidades alejadas. En las tres encuentro una gran relación. No hay discrepancia”.
Especialista en desarrollo de habilidades del pensamiento crítico, creativo y ético, León Monterrubio planteó que no es tan grave que no inicie el ciclo escolar, como el hecho de que no se cumple con el calendario escolar por los paros que normalmente hacen.