“Esto no es Berlín”, un paseo por el underground chilango en un país políticamente cerrado y opresor

* La Generación X y los Millennials, “somos un espejo… Gente que está peleando por el respeto a su propia identidad sexual todavía hoy. El respeto a la identidad de los demás no es natural en nuestro país”, dice el director, el cineasta y músico mexicano Hari Sama en entrevista con Crónica de Oaxaca

*Esto no es Berlín y la película Roma de Alfonso Cuarón comparten similitudes al retratar la Ciudad de México, teniendo como epicentro La Quiñonera, la casa del Palacio del Reventón, una casa completamente clandestina donde coincidían los Lubeski, los Marcovich, Rubén Ortiz y Las insólitas imágenes de Aurora que después se convertiría en Caifanes

Ernestina Gaitán Cruz

Oaxaca 12 de diciembre de 2019.- El cineasta y músico mexicano Hari Sama estrenó este 12 de diciembre en México su película “Esto no es Berlín”, una reflexión sobre la identidad de los jóvenes de los años 80 que al igual que los adolescentes de hoy, lucharon por el respeto a lo que son o buscan ser, comentó el director en entrevista.

El guionista y director de cortometrajes y películas como Sin ton ni Sonia (2003), Tiene la tarde ojos (2003) y El sueño de Lu (2011), hizo con Esto no es Berlín, una película semi autobiográfica con la historia de dos adolescentes de los años 70-80 que buscan su lugar en el mundo.

“Era un país con una tendencia social y política muy cerrada y dictatorial. Precisamente a consecuencia de lo que se vivió en los años 70, que fueron  muy cerrados, castigadores. Los jóvenes no tenían espacios de reflexión, no había conciertos de rock, no había donde exponer; nada”, agregó.

Y ahora que ha tenido la oportunidad de llevar la película a muchas universidades y cineclubes de escuelas diversas, ha notado que les habla muy potente a los adolescentes de hoy. Incluso asevera que la Generación X (los nacidos entre 1972 o incluso entre los años 60 y principios de los 80) y los Millennials (nacidos entre 1980 y 2000) “somos un espejo”.

“Gente sigue luchando, está peleando por el respeto a su propia identidad sexual todavía hoy. El respeto a la identidad de los demás no es natural en nuestro país. Y a mí la palabra tolerancia particularmente me da aversión absoluta. No es tolerancia, es respeto lo que se debe al otro ser humano”.

La cinta que ha sido exhibida en Estados Unidos, España y Perú entre otros países, es cine de autor, pero también un cine cercano a la juventud “y a la gente que tuvo la oportunidad de vivir esos tiempos y pertenecer al underground de este país que no fue cosa fácil”, comentó el cineasta.
De su película Esto no es Berlín, destaca el soundtrack de mucha potencia, de corte oscurón, música ochentera y setentera underground. Entre los músicos figuran Ten Years After, Visage, Roxy Music, Meredith Monk, dijo.

ESTO NO ES BERLÍN, ROMA Y EL PALACIO DEL REVENTÓN

Esto no es Berlín y la película Roma de Alfonso Cuarón tienen algunas similitudes como el ser semi autobiográficas, mostrar a una familia con un padre ausente y una madre desbordada por la situación, así como el retratar la Ciudad de México se le cuestiona y contesta que “fue una súper coincidencia humana”.

La enorme paradoja o explicación, dice, es que ambos, lo mismo que los Lubeski, y los Marcovich convivieron en sus años adolescentes en La Quiñonera (ubicada en Coyoacán), “casa de unos chavitos pintores y que fue muy importante para los jóvenes de los años 80. Ahí ocurría todo: exposiciones, shows”.

Ahí rentaban un cuarto Carlos Cuarón (su amigo de preparatoria), Rubén Ortiz (artista plástico) y Las insólitas imágenes de Aurora que después se convertiría en Caifanes y otra banda. Era la casa del Palacio del Reventón, una casa completamente clandestina, era una casa privada donde expusieron varios artistas, cuenta.

“Nuestra vida adolescente pública giraba alrededor de La Quiñonera. Yo le di un casete a Saul Hernández de Caifanes en su manita para decirle invítanos a tocar y nos invitó y así conocimos a quien fue nuestro manager. Yo tuve una banda que se llamó La muerte de Eurídice”.
Ahí estábamos porque pertenecemos a escuelas abiertas del sur de la Ciudad de México, íbamos a los mismos reventones, coincidíamos en algunos lugares.

Yo no crecí en la Roma, sino en Satélite, en esa oscura zona de la ciudad y cuando iba a ensayar iba a Tlalpan, cruzaba 25 kilómetros para llegar al ensayo, con pura gente del Madrid, donde estudiaron Los Cuarón y Los Lubeski y etcétera.

Hay coincidencias humanas que no puedes evitar. Cuarón, que es mayor que yo, hizo su peli en México, sobre su infancia y la Colonia Roma. Curiosamente se me dio la oportunidad de filmar mi película sobre los 80, que es un poco más reventado y tremendista. Hay una casualidad temporal y una explicación humana.

ESTO NO ES BERLÍN
1986. Ciudad de México. Carlos, 17 años, no encaja en ningún lugar: ni en su familia ni con los amigos en la escuela. Pero todo cambia cuando es invitado a un mítico club nocturno donde descubre el underground: el post punk, la libertad sexual y las drogas que desafían la relación con su mejor amigo Gera.

Créditos y reparto
Actores Lumi Cavazos,José A. Toledano, Américo Hollander, Hari Sama, Juan Carlos Remolina, Marina De Tavira, Xabiani Ponce de León, Ximena Romo Mercado, Mauro Sánchez Navarro, Klaudia García, David Montalvo.

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