*Ni en los gobiernos más corruptos del PRI o de Convergencia, se subió la tarifa; ahora con Morena y la secretaria Claudina de Gyves Mendoza, hija del «celebre» Leopoldo de Gives, el pulpo camionera logra su anhelado sueño
José Luis Martínez
Oaxaca de Juárez. Oax.- La secretaria de Movilidad (Semovi) Claudina de Gyves Mendoza, por cierto, hija del «célebre» Leopoldo de Gives de la Cruz, informó que autorizó el aumento de la tarifa del transporte público urbano en la capital oaxaqueña de 8 a 10 pesos, la cual entrará en vigor en breve, dando así un tremendo golpe a la economía de los oaxaqueños más pobres.
Se trata de un sueño largamente anhelado por el llamado «pulpo camionero». El aumento de la tarifa no ocurrió ni en los corruptazos gobiernos de priistas o convergentes, sino en el presunto izquierdista gobierno de Morena.
El golpe económico se asesta a los oaxaqueños más pobres, los que tienen que usar las chatarras contaminantes que dan un pésimo servicio, que nunca han mejorado las condiciones de sus chatarras.
Según Gyves Mendoza, el aumento, «ajuste» le llama, y que entrará en vigor el 6 de noviembre de 2024, «responde a la necesidad de mejorar las condiciones y garantizar la operación del servicio».
Hay que preguntar por qué ahora con Claudina el pulpo camionero logró el aumento, si ni cuando una representante de ese gremio y propietaria de camiones urbanos se desempeñó como diputada se atrevieron a asestar este duro golpe a los más pobres.
Así funcionan ahora los hijos de los viejos políticos de izquierda, viven como miembros de la alta burguesía aunque en sus discursos se desgarran las vestiduras, «Primero los pobres», dicen.
Ahora resulta que también los corruptos del pasado son los responsables del aumento. Dice que «históricamente la tarifa ha sido ajustada cada 3 años, sin embargo, debido a la negligencia de administraciones anteriores y al abandono del transporte público urbano, este proceso se detuvo durante más de seis años, lo que afectó gravemente el servicio, frenando la puesta en marcha del CityBus, perjudicando a la ciudadanía oaxaqueña y limitando su derecho a un transporte público eficiente y digno».
Como siempre la vieja cantaleta de que con el aumento se va a mejorar el servicio. Eso nunca ha pasado antes, ni pasará ahora. Solamente hay una explicación para asestar este golpe a la ciudadanía, la complicidad con los «empresarios» camioneros, que hoy deben estar brincando de felicidad.
«Los trabajos del Sistema de transporte CityBus y el aumento de la tarifa, permitirán la renovación de las unidades de transporte que es una demanda ciudadana constante y que es un compromiso del Gobierno del Estado. Se tiene estimado la adquisición de 50 unidades en una primera etapa durante el primer semestre de 2025, que tendrán tecnología híbrida para operar en las rutas», señala el boletín de la Semovi. Hay que preguntar y deben aclarar, de dónde va a salir el recurso para la copra de esas unidades. O ¿pasará como en otras ocasiones, en las que el aumento se negoció para permitir que algunos políticos y funcionarios se conviertan en grandes empresarios del transporte urbano, claro, a través de prestanombres?
Según Claudina el incremento respetará la tarifa preferencial para estudiantes, personas mayores y con discapacidad, quienes seguirán gozando de un descuento del 50 por ciento.
Nada más faltaba que también los quitaran.
Y otra vez la vieja mentira de que se capacitará al personal operativo y se llevarán a cabo evaluaciones y operativos de revisión en las unidades, conforme a la ley.
Eso han prometido siempre y nunca se ha cumplido. Por eso vemos a choferes manejando con claros síntomas de influjo de drogas, chatarras contaminantes, sin placas renovadas, convertidos en cafres que diariamente ponen en riesgo la vida de automovilistas, motociclistas y peatones.
Dudamos que, educada en las mejores escuelas y universidades, Claudina haya tenido que viajar en una de esas chatarras que circulan de la central de abasto a El rosario o San Martín Mexicapan.
El transporte urbano es una negociazo. Seguramente nos vamos a enterar qué funcionarios se volverán prósperos empresarios transportistas. Cínicamente, la secretaria señala que con el aumento «se crean las condiciones para garantizar que en 2025 se concrete la renovación de flota de transporte y la incorporación de tecnologías para ofrecer un servicio más seguro, eficiente y accesible». Claro, a costa de la economía de los oaxaqueños más pobres.
En 2023 y 2024, con la introducción de las primeras cuatro rutas del CityBus, se ha logrado transportar a casi 2 millones de personas, incorporando unidades de prueba de la más alta tecnología, recibiendo un 95 por ciento de aprobación por parte de la ciudadanía. La expansión y consolidación del CityBus permitirá que el servicio llegue a todas las y los oaxaqueños.
Para justificar el aumento, al igual que los anteriores, señalan que Oaxaca tiene las tarifas más bajas del país, pero cada vez que se ha aumentado el costo del servicio, las condiciones del mismo nunca han mejorado.
Además, dice, nos salió barato el aumento, porque «el modelo financiero determinó que la tarifa debería ser de 12 pesos para cubrir los costos operativos, el Gobierno del Estado, considerando la situación económica de las familias oaxaqueñas, ha decidido establecer un incremento de 2 pesos, quedando fijada en 10 pesos». ¡Qué buena gente resultaron!