Salvador Flores Durán
Oaxaca.- Asunción Hernández de la Yera, viuda de Marcos Villanueva Serrano, líder histórico de comerciantes del Mercado de Abasto quien murió este lunes a los 75 años, afirmó que el dirigente de la organización de vendedores “Princesa Donají Mercados”, “siempre fue fiel al PRI, su partido. Nunca lo traicionó. Toda su vida sirvió a su partido y su partido se sirvió de él”.
Reveló, que el PRD con Gabino Cué, le ofrecieron que fuera candidato a la presidencia municipal para las elecciones en las que ganó la alianza PRD, PAN, Convergencia y PT, que ganaron los comicios hace seis años, ofrecimiento que rechazó, pero otros partidos también le ofrecieron ser candidato a presidente municipal y a gobernador.
En entrevista conjunta con su hijo, Andrés Villanueva Hernández, en la enorme casa construida de piedra en la colonia Rufino Tamayo de Santa Cruz Xoxocotlán, donde se velan sus restos en una capilla al lado de un enorme salón, los familiares de Marcos Villanueva reciben a los cientos de conocidos y familiares, mientras las paredes se van llenando de ofrendas y coronas de flores blancas.
“Escogió Xoxo para vivir y descansar y aquí en Xoxo se va a quedar”, señaló la señora Asunción, quien con su hijo Andrés, explicaron que el líder de la Central de Abasto nació en 1940 la colonia Santa Anita, de la agencia municipal de San Juanito, y fue el mayor de 8 hermanos, por lo que apenas terminó al primaria se puso a trabajar para ayudar al sostenimiento de su familia.
Villanueva Serrano trabajó mucho tiempo en el campo y ya adolescente se inició en un taller mecánico, donde prácticamente no le pagaban nada. Además, se desempeñó como chofer de camiones de carga y posteriormente entró a trabajar en la Joyería Ortiz, donde empezó haciendo la limpieza hasta que aprendió el oficio y se especializó en montar circonias y diamantes a los anillos, aretes y collares. Recuerdan que en ese taller se fabricó la corona de la Virgen de la Soledad, la cual fue robada en el año de 1987.
Posteriormente, Villanueva Serrano puso su propio taller de joyería y vendía su producción a joyerías tradicionales de la capital oaxaqueña. Recordaron que en su juventud, Marcos fue un gran deportista, practicó ciclismo y destacó como cátcher del equipo de béisbol Radio Marconi.
La señora Asunción rememoró que cuando trabajaba con su hermana en una tienda y gasolinera en el municipio de La Luz, Tututepec, en la región de la Costa, lo mandó llamar, Jesús Martínez Álvarez, quien había sido su compañero de clases en la primaria.
Villanueva Serrano fue elegido como agente municipal de San Juan Chapultepec, cargo en el que fue relecto, pero ya no concluyó el segundo periodo, cuando el entonces presidente municipal de Oaxaca de Juárez, Martínez Álvarez, lo nombró como primer administrador del Mercado de Abasto, cargo en el que se desempeñó por cinco años.
Luego de ello, formó su agrupación “Princesa Donají”, en la que llegó a tener más de ocho mil agremiados, todos ellos locatarios fijos de la Central de Abasto.
Villanueva Serrano tuvo 16 hijos, cuatro con la señora Asunción, 32 nietos y tres bisnietos.
Mientras los asistentes al funeral rezan en la capilla, otros más comen verde de espinazo en las mesas de madera dispuestas en el salón de la casa, una banda de música toca a todo lo que da, Las mujeres se afanan en servidor los platillos, las bebidas y están atentas a que nadie se quede sin comer. Las botellas de mezcal también circulan para servir a los asistentes.
Relataron que la encomienda que tenía Villanueva como administrador del recién inaugurado mercado Margarita Maza o de Abasto, fue convencer a los vendedores que todavía ocupaban las calles de las Casas y 20 de Noviembre, quienes no querían cambiarse al nuevo centro comercial por las bajas ventas, porque los compradores no llegaban por la lejanía y la inseguridad que generaba la cercanía de la zona de tolerancia conocida como El Pueblito.
La zona de tolerancia fue clausurada en el gobierno de Martínez Álvarez, cuando el gobierno de Pedro Vásquez Colmenares planeaba un proyecto turístico muy ambicioso para Oaxaca, con la construcción del Auditorio Guelaguetza, la Central de Abasto y la Central Camionera de Segunda Clase, con la finalidad de liberar las principales calles del Centro Histórico para atraer a los visitantes.
La señora Asunción y Marcos se casaron por lo civil en enero de 1998 después de 20 años de vivir juntos, “en enero cumplimos 33 años de casados” luego de que le realizaron dos cateterismos hace 18 años, porque siempre padeció del corazón, “se cuidaba mucho desde entonces y siempre tenía a su médico de confianza que lo atendía”.
Relató que conoció a Marcos en la Central de Abasto, cuando ella atendía su puesto de anafres y artículos de aluminio, donde dice empezó a ser un líder por el respaldo de los comerciantes que habían sufrido muchas injusticias.
El grupo “Princesa Donají Mercados”, señala, dejó de funcionar hacer cuatro años, luego de que Villanueva formó a muchos de los líderes de comerciantes de la Central, “él fue su líder, les enseñó a defender las causas, no a cobrarle a los vendedores”.
Dijo que los primeros líderes del lugar fueron Genoveva Medina, quien fuera la primera mujer senadora de Oaxaca, y Marcos. Al perder influencia Genoveva Villanueva impulsó la formación de nuevos líderes y llegaron a conformar el llamado grupo de los 13, entre ellos muchos de los que actualmente son dirigentes de organizaciones y políticos, entre ellos Israel Ramírez Bracamontes, dirigente del PRI municipal, y Hugo Jarquín, exdiputado local y federal por el PRD.
Comentaron que en el mercado Margarita Maza “ahora son más de 100 líderes. Cualquiera con cinco gritones ya es líder o dirigente”.
Villanueva no quiso seguir una carrera política, u ocupar cargos de elección popular, porque, dijeron, “no le gustaban a los que le ponían de acompañantes. Él hizo a muchos dirigentes, dependían de él y de él aprendieron lo bueno”.
La Central de Abasto se inició en 1970 en el gobierno de Víctor Bravo Ahuja, para liberar las calles del centro que ocupaban los comerciantes y proyectar a Oaxaca como un destino turístico, mediante un proyecto que contempló la construcción del Auditorio Guelaguetza, el Periférico y la Central Camionera de Segunda Clase.
Bravo Ahuja dejó la gubernatura para ser Secretario de Educación Pública con Luis Echeverría Álvarez, quedando como interino Fernando Gómez Sandoval, quien colocó la primera piedra de la Central de Abasto y Camionera, las cuales se concluyeron en 1974.
La Central de Abasto fue construida en una extensión de 21 hectáreas y tuvo un costo de 509 millones 625 mil pesos, pero los comerciantes instalados en las calles de Aldama, 20 de Noviembre, Miguel Cabrera, al contorno de los mercados “20 de Noviembre” y “Juárez Maza”, no se convencían de cambiarse al nuevo centro comercial por las bajas ventas y porque se quejaban de la inseguridad provocada en sus cercanías por la zona de tolerancia conocida como El Pueblito, en la calle de Galeana.
El traslado de los locatarios fue lento y paulatino, y muchos liderazgos crecieron en esa época al ofrecer puestos a quien quisiera, e incluso muchos de los locales permanecieron cerrados por años.
Cuando Martínez Álvarez asume la presidencia municipal cierra El Pueblito y clausuran la gran mayoría de bares que se ubicaban en la zona, con lo que empieza a funcionar de manera efectiva la Central de Abasto, aunque todavía no se convertía en el enorme centro que hoy es la principal fuente de ingresos de la economía del estado.
Como administrador de la Central conformó un poderío fundado en la fuerza y un férreo control a través de un grupo de choque que fue conocido como “Las Pájaras”, bautizadas con ese mote por lo aguerrido de las comerciantes que lo conformaban, el cual siempre estuvo a disposición del Partido Revolucionario Institucional, para controlar a los grupos disidentes y opositores.
Al paso del tiempo, el liderazgo de Marcos Villanueva empezó a perder fuerza y empezaron a surgir más de 70 líderes de organizaciones de locatarios, tianguistas y comerciantes ambulantes, algunos con el apoyo de grupos de poder y dirigentes al interior del PRI, mientras que en los últimos años otros liderazgos se agruparon en torno a otros partidos, como el caso de Hugo Jarquín, con el PRD.
Entre los liderazgos más connotados se contaban el de Roberto Mendoza, dirigente de mercaderes y ambulantes, quien fue asesinado el 1 de diciembre del 2009, e Israel Ramírez Bracamontes, dirigente de la organización Lázaro Cárdenas y hoy dirigente del PRI municipal.
Los liderazgos como el de Villanueva Serrano se impusieron con grupos de choque, el uso de la fuerza, el miedo y un férreo control de las cuotas que se cobran a los locatarios y vendedores ambulantes que operan en la Central, donde se calcula que hay más de 16 mil locatarios y diariamente acuden más de seis mil vendedores ambulantes.
En la Central de Abasto no todo el comercio es legal, ya que las actividades ilícitas, como la venta de “fayuca”, la prostitución, la venta de mercancía pirata, representan algunos de los giros económicos más fuertes de ese centro. Los líderes del lugar lograron amasar fortunas cuantiosas y gran influencia política.
A los cumpleaños del dirigente acudían locatarios, vendedores, líderes de organizaciones y una larga lista de políticos de todos los niveles, quienes reconocían en Villanueva Serrano a un líder de gran importancia e influencia.
Con la Muerte de Villanueva Serrano se termina un ciclo al ser considerado un líder histórico de la Central de Abasto.
