Agencia JM
Oaxaca, 31 de mayo de 2018.- En pleno proceso electoral y por la indolencia gubernamental, la disputa de 19 mil hectáreas de tierras entre campesinos de San Vicente Coatlán y Sola de Vega provocó una balacera que duró alrededor de media hora, precisamente cuando un grupo de comunicadores y autoridades comunales realizaban un recorrido en la zona en conflicto.
El ataque armado ocurrió ante el abandono en que viven los pobladores de San Vicente Coatlán por un añejo conflicto agrario con sus vecinos de Sola de Vega, que ha cobrado una docena de víctimas.
La indolencia del gobierno del estado y federal por lograr una solución definitiva a la disputa de 19 mil hectáreas de tierras, provocó la determinación de la ciudadanía de no permitir la instalación de casillas el próximo 1 de julio, así como el ingreso de ninguno de los candidatos locales y federales de todos los partidos políticos para realizar campañas proselitistas.
La agresión de los pobladores de las agencias de Paso Ancho y Rancho Viejo del municipio de Sola de Vega ocurrió cuando reporteros de diversos medios de comunicación, acompañados de las autoridades comunales de San Vicente Coatlán realizaban un recorrido por la zona en disputa.
El ataque armado, en el que se utilizaron fusiles de asalto, por las ráfagas que se escucharon a la altura de lo que sería la presa Paso Ancho, duró alrededor de media hora, a solo unos 500 metros de la base mixta de la policía estatal y militar a cargo de personal de la 44 Zona Militar de Miahuatlán de Porfirio Díaz.
El presidente de Bienes Comunales, Luciano Osorio Ruiz, y el presidente municipal Hipólito Santiago Jiménez, confirmaron que la comunidad blindó el municipio y a sus tres agencias del distrito de Ejutla de Crespo de toda actividad electoral.
En conferencia de prensa, señalaron que la ciudadanía solamente elegirá a sus autoridades municipales en asamblea general que se rige por el Sistema de Usos y Costumbres, pero sin la injerencia de ningún partido político.
El conflicto agrario, que por el momento se encuentra en manos del Tribunal Unitario en un juicio de revisión, data de hace más de 60 años, que ha generado un clima de inestabilidad social e inseguridad en la zona.
A unos metros del lugar, se encuentra como mudo testigo parte de la obra inconclusa y abandonada del proyecto de la presa Paso Ancho que captaría el agua del Río Atoyac para abastecer del vital líquido a la ciudad de Oaxaca.
Los denunciantes aclararon que la única demanda es pacificar la zona para que los campesinos de San Vicente Coatlán puedan trabajar y producir sus tierras localizadas en la zona libre del conflicto y parar el baño de sangre que los mantiene en constante tensión e incertidumbre.
Señalaron que el proyecto de la presa Paso Ancho y la supercarretera Barranca Larga-Ventanilla, les traería desarrollo, certidumbre y paz, todo ha sido un engaño del gobierno federal y estatal y hasta el momento ambos proyectos se encuentran paralizados y abandonados y solo han generado odio, encono y muertes, al no haberse socializado previamente.