*Ciudades como Londres y Tokio se vuelven geopolíticamente más importantes que los países en los que se encuentran, ya que logran un papel geopolítico más prominente; sin embargo, existe un mapa religioso mundial paralelo, con sus propios nodos y jerarquías de poder, que no ha recibido suficiente atención.

Tijuana, B.C.- El pasado viernes se llevó a cabo en El Colegio de la Frontera Norte (El Colef) la 11a. Sesión del Seminario Permanente Sobre Migración Internacional “Religión y escalamiento geopolítico: cómo Santo Toribio colocó a Santa Ana (Jalisco) en el mapa religioso global”, la cual contó con la ponencia de la Dra. Peggy Levitt, investigadora del Departamento de Sociología de Wellesley College.

En su introducción, la Dra. Levitt explicó cómo Santa Ana de Guadalupe, en Jalisco, México, con 311 residentes se ha convertido en un sitio importante en el contexto de la expansión religiosa transnacional creada por los mexicanos dondequiera que migran, debido a la relevancia creciente de Santa Ana con su ubicación.

“La relevancia creciente de Santa Ana se relaciona con su ubicación, en la intersección de múltiples confluencias que refuerzan su posición: la veneración del Santo Toribo como el santo patrón de los migrantes, la Ruta Cristera que celebra la fuerza perdurable del catolicismo en esta región, la industria del tequila junto con la nostalgia y el orgullo en la cultura ranchera, y la larga historia de la migración transnacional de la región”, indicó la especialista.

Con respecto a la figura del Santo Toribio, la académica indicó que éste fue uno de los 25 mártires cristianos que canonizó el Papa Juan Pablo II, porque defendió el catolicismo durante la revolución mexicana y la guerra cristera.

“La historia es algo parecido a esto; hay un migrante, Jesús, que intento cruzar 3 veces la frontera sin éxito alguno, pero cuando ya había perdido la esperanza apareció un señor proveniente de Santa Ana de nombre Toribio, que lo ayudó a establecerse; 2 años después Jesús lo fue a buscar pero en el lugar le dijeron que solamente se encontraban sus restos desde hace algunos años en la capilla del pueblo” contó la especialista.

Ante esto, prosiguió la experta, muchos migrantes decían que éste mismo personaje también los había ayudado a cruzar, a sacar papeles, a encontrar un trabajo. “Está mercadeando recuerdos religiosos como velas o estampillas que la gente usa para asegurar su migración, lo que hace a Santa Ana un sitio importante, donde los migrantes deben volver”.

Por otra parte, la Dra de Wellesley College hizo énfasis en los actos terroristas cometidos recientemente en San Bernardino y en París, refiriéndose a los perpetradores de estos sucesos como “gente que se ubica en el mundo en un campo transnacional religioso y se sienten ciudadanos globales religiosos”.

“Su mundo está construido por sitios sagrados, donde aparecen figuras religiosas, sin banderas ni capital nacional; son ciudadanos religiosos exclusivos que se educaron en el mundo a través de sus creencias religiosas, donde solamente cuidan a los demás que compartan sus creencias,” afirmó.

La sesión dio clausura al ciclo 2015 del Seminario Permanente sobre Migración Internacional (Sepmig) de El Colef, en colaboración con el Instituto Mora; el Colegio de Michoacán; el Instituto de Investigaciones Sociales y el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM; el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social; El Colegio de la Frontera Sur; la Universidad de California en Los Ángeles; la Universidad de la Coruña; El Colegio de México; la Universidad del Sur de California y la Sociedad Mexicana de Demografía.