Facundo Espinosa Miguel
Oaxaca.- El candidato de la coalición conformada por el PRI, PVEM, y Panal, Alejandro Murat Hinojosa, el más fuerte de los aspirantes a gobernador de Oaxaca, se registrará este jueves ante el órgano electoral, previo al arranque formal de las campañas que iniciarán el 3 de abril.
En la que se espera sea una contienda sin precedentes y de alta competitividad, el candidato con las mayores posibilidades de ganar en los comicios del 5 de junio próximo es Alejandro, al sumar los votos duros del Revolucionario Institucional, el Verde Ecologista de México y Nueva Alianza, porque se enfrentará a los candidatos de una izquierda fracturada y pulverizada entre tres aspirantes: José Antonio Estefan Garfias “Pepe Ñoño”, Benjamín Robles Montoya “Cara sucia”, el “honesto” Salomón Jara.
Si bien la alianza “CREO” (que soy del PRI, Pepe Ñoño dixit) aglutina también al Partido Acción Nacional, éste es prácticamente invisible en materia de votos y poco va a aportar a la campaña de su candidato a gobernador.
Por cierto, Pepe Ñoño se ufana en decir que él sí es oaxaqueño, cuando sus raíces son libanesas y su corazón priista lo traiciona a cada momento. Los viejos perredistas de plano buscarán otra opción de voto. Aquellos que fundaron el Partido de la Revolución Democrática, los militantes que pensaron que el PRD representaba una verdadera opción de cambio para México y el Oaxaca, todavía lo recuerdan como el persecutor de militantes durante el sexenio de Diódoro Carrasco, cuando todo el estado se llenó de cruces por los muertos que dejó el actual Secretario General de Gobierno al servicio de las aspiraciones presidenciales del gobernador poblano, Moreno Valle.
Fue de tal magnitud la represión en ese sexenio en que Pepe Ñoño fue Secretario General de Gobierno, dirigente del PRI, diputado federal y frustrado aspirante a gobernador, que muchos de quienes se opusieron a la política de garrote contra el perredismo, terminaron en la cárcel.
Pepe Ñoño fue diputado federal gracias a que Carrasco Altamirano metió a la cárcel al entonces candidato a diputado federal por Tehuantepec, el exdirigente del sindicato petrolero Alfredo López Ramos.
El “favorito” de Diódoro Carrasco ganó gracias a que López Ramos fue a dar a la cárcel por influencias del entonces gobernador de Oaxaca. Como esta hay muchas historias de cómo el perredismo fue golpeado duramente por el gobierno diodorista para apuntalar sus aspiraciones continuistas a través de Pepe Ñoño.
Envejecido, dando traspiés, equivocándose un día sí y el otro también, el candidato de “CREO” que soy del PRI, va nuevamente por la gubernatura de Oaxaca, con todo el apoyo de su mecenas desde Puebla y todo el aparato gubernamental local, pero con un montón de años más encima, con una imagen desgastada, cuesta arriba y una campaña que no logra levantar a pesar de los caudales de dinero que lo respaldan.