* Chía y linaza son ricos en omega 3 por lo que contribuyen a disminuir los triglicéridos
* El alpiste combate la hipertensión y ayuda a quemar grasa corporal y prevenir la obesidad
Por Ivonne Jiménez
Ciudad de México.- La época actual, donde los alimentos procesados abundan y se consumen pocos alimentos frescos, ha originado deficiencias en los nutrientes esenciales de la dieta. Y se han acrecentado problemas de salud, por ejemplo la epidemia de la obesidad afecta a México, mucha más seriamente que a la mayoría de otros países.
La reciente publicación Fit not FAT de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), revela que México es el segundo país de la con más población obesa, después de Estados Unidos. Tres de cada 10 personas son obesas y casi siete de cada 10 tienen sobre peso.
Por ello mucha gente regresa a los alimentos naturales que pueden bajar el colesterol y acelerar el metabolismo, pues al ser fuente de fibra, contienen omega y más cualidades que ayudan a mejorar las condiciones del cuerpo. Nos referimos al alpiste, la chía y linaza.
Estas semillas son excelente fuente de fibra, proteínas y antioxidantes, por lo que ayudan a bajar de peso, previenen la arterosclerosis, eliminan la cirrosis y retrasan el aumento del azúcar en la sangre, por lo que especialistas han realizado estudios a fondo para investigar sus propiedades.
Recientemente científicos investigadores de la UNAM analizaron el poder alimentario del alpiste y encontraron que es alta en proteína vegetal la cual tiene aminoácidos, además está cargada de enzimas y las más abundantes es la lipasa, que es la encargada de eliminar las grasas en exceso que lleva el cuerpo, por lo cual ayuda a quemar grasa corporal y prevenir la obesidad y la celulitis.
Además, ayuda a desinflamar órganos como el hígado, riñones y páncreas, toda vez que al ser una bebida diurética y refrescante, disminuye el colesterol malo, estabiliza los niveles de azúcar en la sangre, combate la hipertensión. Asimismo, tiene un gran poder antioxidante que retarda el envejecimiento prematuro y proporciona tonicidad muscular.
La chía, según Christopher Mc Dougail, corredor de ultramaratones y escritor del libro “Born to Run” acredita a estas semillas un alimento excepcional para los atletas ya que una cucharadita es como una batido de salmón y espinacas ya que es una excelente fuente de fibra, antioxidantes, calcio, proteínas y ácidos grasos omega 3.
A estas semillas se les atribuye dos veces la proteína de cualquier otra, cinco veces el calcio de la leche entera, dos veces la cantidad de potasio de los plátanos, tres veces más antioxidantes que los arándanos y tres veces más hierro que las espinacas.

Por su parte, las semillas de linaza de acuerdo a estudios realizados por especialistas del IMSS, posee un potencial anticanceroso y antioxidante, que incluso tiene acciones benéficas en enfermos de lupus eritematoso sistémico y ayuda a las mujeres a reducir los bochornos en la menopausia, limpia las arterias y controla los niveles de azúcar en la sangre.
La Linaza contiene 27 compuestos identificables como anticancerígenos, Según el Dr. James Duke del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Por su parte Martha Leticia Viveros coordinadora de Programas Nutricionales de PREVENIMSS, dice que también ayuda con los problemas de gastritis, acidez estomacal y mejora la tensión en aquellas personas que están sometidas a estrés.
Las semillas de linaza, al igual que la chía, al ser ricas en omega tres contribuyen a disminuir los triglicéridos, evitan las enfermedades cardiovasculares, ayudan al desarrollo neuronal y a la visión de los niños. Se pueden tomar con agua para calmar la ansiedad o triturar con un molinillo de café, agregar al pan ensaladas, salsas, sopas,o yogurt, a diferencia del alpiste que se puede consumir en leche y te.
Antes de incluir estas semillas en tu dieta o y si padeces alguna enfermedad crónica, es recomendable acudir con tu médico o nutriólogo para que te especifique la cantidad que debes consumir.