Oaxaca.- Todo el pueblo de Santa María Ecatepec despidió a las los 11 hombres y dos mujeres que fueron asesinadas a balazos por habitantes de San Lucas Ixcotepec la mañana del pasado lunes en un paraje ubicado en el área de las 3,600 hectáreas de tierras que disputan ambas comunidades indígenas en la región de la Sierra Sur.
Las víctimas fueron agredidas cuando acudían a realizar el tequio y a limpiar el terreno para la siembra de maguey, cuando fueron emboscados en inmediaciones del paraje Cerro de Cara.
La noche del marte el sepelio múltiple convocó la asistencia de prácticamente todo el pueblo donde las familias despidieron a sus muertos con expresiones de profundo dolor.
El pueblo se llenó de silencio que se rompía con el llanto mezclado con los olores de las flores y los cirios de las tumbas. La multitud caminó cargando en cortejo los 13 féretros hasta la tumba múltiple en el panteón municipal donde se escavó para construir 13 lugares con tabiques.
Las víctimas fueron asesinadas con armas de alto poder de acuerdo con el calibre de los casquillos encontrados en el lugar del ataque que corresponden a rifles de asalto AK-47, “cuerno de chivo”, de calibre 7.42, fusiles AR-15 del calibre .223, escopetas calibre 20 y otros.
El problema entre los pueblos vecinos se agudizó cuando los de Ecatepec cerraron el camino que comunica a la ciudad de Oaxaca y al Istmo de Tehuantepec de septiembre de 2016 a mayo de 2018, periodo en el que estuvieron aislados y se vieron obligados a usar caminos alternos para realizar sus actividades económicas y de gestión.