En caso de perder la mayoría en la Cámara de Diputados en las elecciones del 6 de junio, Morena y sus aliados políticos impulsarán la realización de un periodo extraordinario para modificar las leyes electorales, advierte Ricardo Monreal, coordinador de la bancada morenista en el Senado.
Para ello, estas fuerzas políticas harían valer la mayoría calificada que tendrán en la próxima Comisión Permanente, ya que, debido al número de diputados y senadores que poseen, alcanzarían 67.5 por ciento del poder de voto.
Por sí solo, el partido en el poder tendría 51.3 por ciento.
“Vemos que el árbitro por momentos se convierte en parte y abandona su labor de arbitraje imparcial”, consideró Monreal, motivo por el cual procesarían la reforma en julio o agosto, como una “estrategia política y legislativa”, según afirma el zacatecano.
Pero si Morena mantiene la mayoría, la reforma se iría hasta el primer periodo de sesiones de la próxima legislatura.
En 2007, por presión del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el Senado avaló una reforma electoral que ordenó, entre otras cosas, la salida del entonces presidente del Instituto Federal Electoral (IFE) y otros dos consejeros.
En esa ocasión, Monreal, entonces integrante del Sol Azteca afirmaba que mantener a Luis Carlos Ugalde, presidente del INE sería revivir el 2006 en 2009, pues consideraba que se había realizado un fraude en los comicios donde llegó a la Presidencia el panista Felipe Calderón.
Al final, Ugalde y dos consejeros más debieron salir del Instituto, debido a una reforma constitucional, sin embargo, ahora a Morena no le alcanza para realizar una modificación de tal magnitud.
Monreal se dice confiado de llevar su estrategia hasta el primer periodo de sesiones, pues espera mantener la mayoría legislativa en la Cámara de Diputados.
El partido fundado por Andrés Manuel López Obrador está en el escenario de convertirse en la primera fuerza política que, por sí misma alcanzaría 51.3 por ciento del poder del voto en la próxima Comisión Permanente, y junto a sus aliados, alcanzaría una mayoría calificada, con 67.5 por ciento para convocar a los periodos extraordinarios que considere necesarios antes de terminar esta Legislatura.
Esta semana los grupos parlamentarios abren la negociación para la integración de la Comisión Permanente, con una correlación de fuerzas diferente a la que tuvieron el año pasado, dada la decisión de senadoras del PRI, MC y PVEM de sumarse a las filas de Morena, lo que provocó que el PRD esté en riesgo de perder el único lugar que tiene en la Permanente.
Morena pasó de 60 a 63 integrantes, entre 2020 y 2021, lo que implica un aumento de 47.6 por ciento a 49.2 por ciento, en el poder interno del Senado, lo que se traduce en su derecho a tener nueve integrantes en la Permanente a partir del 1 de mayo, no los ocho que tuvo el año pasado.
El año pasado, el voto del senador perredista, Miguel Ángel Mancera frenó, en tres ocasiones, las intenciones de Morena de abrir un periodo extraordinario para eliminar fideicomisos y aumentar las facultades del Poder Ejecutivo para modificar el Presupuesto de Egresos de la Federación.
No obstante, Monreal afirma que “en el grupo se ha opinado que no, que vamos a tener estrictamente lo que nos corresponde, de acuerdo con los números. Y es que en la última etapa, Morena se fortaleció con tres asientos más”.
Magnánimo, recordó que “desde dos ocasiones pasadas, nosotros aceptamos, aun cuando no tenía el PRD el número suficiente de asientos, que el PRD tuviera un representante”.