Salvador Flores Durán
Es lamentable la simulación y la continuidad de una “celebración” que solo busca disfrazar las pésimas condiciones del periodismo en el estado de Oaxaca.
Debemos recordar que la celebración del Día de la Libertad de Prensa fue instaurada por el viejo régimen para formalizar de manera cínica el amasiato entre el poder y los dueños de los medios de comunicación.
El oficialismo de “izquierda”, desde su mediocridad y su baja estatura intelectual, y el viejo cadáver del priismo y sus exjefes de prensa, que nunca aportaron nada al desarrollo del periodismo oaxaqueño, por separado “celebran” y “festejan” una efeméride hueca, que sigue sirviendo para el lucimiento de funcionarios de medio pelo, cuando se vive una de las peores épocas para los periodistas y para el ejercicio crítico de la profesión.
Es lamentable la situación actual del periodismo y de los periodistas en Oaxaca:
-Pauperización de los trabajadores de los medios con bajos salarios y desempleo.
-Desaparición de empresas de comunicación, especialmente de medios impresos. (El cierre de al menos 30 medios impresos en las últimas décadas).
-Franco retroceso y falta de calidad periodística en el entorno de los medios digitales y las redes sociales.
-Improvisación y falta de capacitación profesional.
-La persistencia de las viejas prácticas de manipulación y control de periodistas y medios desde el poder.
-La proliferación en el medio de orejas y policías disfrazados de periodistas.
-Las presiones desde el poder a los medios y periodistas críticos.
-La proliferación de mercenarios y “líderes” de grupos a la venta del mejor postor y de políticos de viejo y nuevo cuño.
-El pésimo e indigno trato de las oficinas de “comunicación social” para los periodistas en general.
-Una “política” de comunicación social en manos de ignorantes, voraces depredadores de los recursos públicos, que han profundizado el trato indigno y la manipulación perfeccionando el viejo estilo priista.
Así la estulticia celebrando el 7 de junio.