Sara Lovera
(saraloveralopez@gmail.com)
México, octubre (SEMlac).- Solo 26,2 por ciento de los trabajos recuperados entre mayo y agosto de este año han sido ocupados por mujeres, revelan cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo con la institución, de siete millones 139.463 personas que lograron recuperar un empleo entre mayo y agosto de este año, solo un millón 868.621 fueron mujeres, lo que significa 26,2 por ciento de las plazas que se han logrado reactivar durante la nueva normalidad. Lo que significa que más de siete de cada 10 empleos reactivados fueron para los hombres.
La cifra contrasta con lo ocurrido durante abril, cuando la pérdida de empleos “fue más pareja”, ya que de los 12 millones 460.841 plazas laborales que se perdieron con respecto a marzo, 43,4 por ciento fueron de mujeres y 56,6 por ciento fueron de hombres.
INEGI da cuenta de que, por sexo, de los 5.41 millones de empleos femeninos que se perdieron en abril, solo se han reactivado un millón 870.000, lo que significa una tasa de recuperación de plazas laborales apenas de 34,5 por ciento.
En cambio, para los hombres, de los 7,5 millones de empleos perdidos en el primer mes de la contingencia sanitaria, se han logrado recuperar 5.27 millones, lo que significa una tasa de recuperación de 74,8 por ciento.
En la brecha laboral, que suma a la desocupación ampliada a quienes tienen un empleo pero reportan tener necesidad de trabajar más (subocupación), pasó de 23,8 a 41,2 por ciento de la fuerza laboral en las mujeres, entre marzo y agosto. En los hombres, esta brecha se movió de 16,1 a 29,9 por ciento de la fuerza laboral en el periodo de referencia.
Empleo y calidad
En calidad del empleo, las mujeres también registran una clara desventaja, según los datos del INEGI hasta agosto de este año.
Los 1.87 millones de empleos femeninos recuperados entre abril y agosto se conformaron por una creación 2.25 millones de plazas informales y una destrucción de 379.000 plazas formales.
En contraste, los 5.27 millones de empleos masculinos reactivados en el lapso de referencia se integran por la creación de 4.90 millones de empleos informales y 372.000 plazas formales.
Con esto, en las mujeres no solo la totalidad de los empleos reactivados han sido en la informalidad, es decir, ante unidades económicas no registradas y/o ante empresas formales, pero sin acceso a la seguridad social ni prestacionales de ley; sino que también ha habido destrucción de empleo formal.
En cambio, en los hombres, si bien la gran mayoría de empleos recuperados también han sido en la informalidad, cuando menos siete por ciento del total fue formal.
Desigualdad
La recuperación desigual del mercado laboral por género se ve también reflejada en las tasas de desocupación y de necesidades de empleo, conocida esta última como brecha laboral.
La desocupación ampliada –que suma a quienes buscan activamente un empleo (desempleados abiertos) y a quienes no lo buscan, pero que están disponibles para trabajar si se les ofrece uno (inactivos disponibles)–, en las mujeres se ubicó 7.5 millones de personas, es decir, 28,5 por ciento de la fuerza laboral en agosto. En marzo, eran 4.6 millones de mujeres desocupadas o 17,3 por ciento de la fuerza laboral femenina.
Para los hombres, la desocupación ampliada pasó de ocho a 16 por ciento de su fuerza laboral, es decir, de 2.9 a seis millones de personas.