Salvador Flores Durán
Oaxaca.- Oaxaca es el segundo estado con más periodistas asesinados, 12 en un lapso de 10 años y con ocho en lo que va de la presente administración, y es el segundo estado el país en esta cifra negra, sólo después de Veracruz.
Hasta el momento ni la Fiscalía del Estado ni la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, han informado sobre el estado de las investigaciones respecto a los crímenes de los reporteros Elidio Ramos Zárate y Raúl Cano López, ocurridos el pasado 19 de junio, en el contexto del conflicto político protagonizado por organizaciones políticas y el magisterio oaxaqueño.
Estos dos crímenes son los más recientes de una larga lista de víctimas de trabajadores de los medios de comunicación, y a pesar de las condenas de organismos internacionales sobre estos hechos la gran mayoría de los casos continúan impunes.
En enero de este año también fueron asesinados los periodistas Marcos Hernández Bautista, en Pinotepa Nacional,Reynel Martínez Cerqueda, conductor de la radiodifusora El Manantial, de Santiago Laollaga, en el istmo de Tehuantepec.
El más reciente de los crímenes fue el de Elidio Ramos Zárate y Raúl Cano López, lo que provocó reacciones como la de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), que sentenció: “México vive una de sus peores crisis en derechos humanos, de libertad de expresión y libertad de prensa.”
Ese organismo humanitario detalló que Oaxaca se ha convertido después de Veracruz en una de las entidades con más periodistas asesinados: doce en los últimos 10 años, de los cuales, ocho ocurrieron en la actual administración de gobierno de Gabino Cué.
A su vez, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el asesinato del periodista Ramos Zárate, “el reportero recibió dos balazos a quemarropa en la cabeza por parte de desconocidos mientras cubría una protesta de maestros” en Juchitán.
El organismo instó a las autoridades mexicanas a “actuar de manera pronta y oportuna para investigar el crimen e identificar y sancionar a los responsables”, y manifestó una “especial preocupación por la reiteración de este tipo de actos violentos contra periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en México”.
El homicidio de Marcos Hernández Bautista fue primer caso que ocurre en Oaxaca en este año. El crimen ocurrió en San Andrés Huaxpaltepec y su cuerpo fue localizado en la Carretera Federal Costera 200, que conduce hacia el municipio de Santiago Jamiltepec.
En el 2014 fueron asesinados en Oaxaca los periodistas Abel Bautista Raymundo y Filadelfo Sánchez Sarmiento, y en 2013 fue asesinado también el reportero de la sección policiaca de El Imparcial, Alberto López Bello.
De acuerdo con el Informe estadístico correspondiente al año 2015 de la Fiscalía Especial para la atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión de la PGR, las cifras de la Procuraduría y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos diferían en cuanto a las cifras. Mientras la PGR señal que de 2000 al año 2015 se habían cometido en el país 103 crímenes de periodistas, la CNDH reportaba 89.
De acuerdo con las cifras de la PGR, Chihuahua y Veracruz encabezaban la lista negra con más crímenes de periodistas asesinados con 16 en cada estado, seguidos por Tamaulipas con 13, Guerrero con 11, Sinaloa con 7, y en quinto lugar se ubicaba Oaxaca con seis. A pesar de las condenas de organismos internacionales y nacionales así como de asociaciones de periodistas locales, en ninguno de los casos ocurridos en la entidad se ha detenido a los responsables.
Suman ocho periodistas asesinados en Oaxaca durante el gobierno de Gabino Cué
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