*Autoridades manifestaron su postura ante el plagio que hizo la diseñadora francesa Isabel Marant y llamaron al Estado Mexicano a proteger la propiedad cultural de los pueblos indígenas
Ernestina Gaitán Cruz.- Representantes de Santa María Tlahuitoltepec Mixe, Oaxaca, llamaron al Estado Mexicano para que proteja la propiedad colectiva, intelectual y bio cultural de los Pueblos Indígenas de Oaxaca, específicamente en el caso de los elementos y patrones gráficos de la blusa de Tlahuitoltepec, plagiado por la diseñadora francesa Isabel Marant.
En conferencia, el munícipe Erasmo Hernández González y 12 integrantes de su cabildo, señalaron que la creadora “está cometiendo un plagio, porque la colección Etole primavera-verano 2015, tiene el patrón gráfico propio de la Blusa de Tlahuitoltepec, que ha trascendido fronteras y no es una creación novedosa como lo afirma. Por lo tanto, exigimos detenga la producción bajo su firma y repare los daños ocasionados”.
Asimismo señalaron que de acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la afrenta es más grave de lo que imaginó la diseñadora, porque el artículo segundo señala que la nación tiene una composición pluricultural fundada en los pueblos indígenas.
“Perder un aspecto esencial de la cultura, vulnera y reduce la diversidad cultural del país, contraviniendo lo establecido en la Carta Magna y demás instrumentos internacionales en la materia”, afirmaron.
En su exposición destacaron la importancia de la blusa que usan las mujeres de la comunidad, y que constituye un elemento que convierte la manufactura artesanal en una actividad socioeconómica, sociocultural (porque preserva la tradición), pero sobre todo la materializa bioculturalmente porque Tlahuitoltepec es una entidad viviente, porque no es pasado ni museo ni folclor, sino portador de cultura que hacer referencia a la biodiversidad de la región.
En su pronunciamiento, invitaron a la artista francesa para que visite la comunidad, para que conozca a las artesanas y pueda apreciar cómo se comparte la blusa en la cotidianidad, para que haga el reconocimiento explicito del diseño de origen que copió y que fue denunciado desde principios de enero por la cantante oaxaqueña Susana Harp, en su cuenta de twitter.
Asimismo, como pueblo de Tlahuitoltepec invitaron a las comunidades indígenas a manifestarse contra la apropiación bio-cultural a conveniencia, contra los intereses particulares, de manera que se detenga la producción y venta bajo firma exclusiva alguna, que se detenga el plagio y el saqueo de que son objeto los pueblos indígenas.
Al respecto, en la página donde se anunció la blusa, el precio era 290 dólares, más de cuatro mil pesos, siendo que en tiendas de Oaxaca es vendida en promedio en 600 pesos, de acuerdo con el Instituto Oaxaqueño de las Artesanías.
Entre los puntos de su pronunciamiento, también convocaron a las organizaciones civiles, comunitarias y académicas del país para que se sume a su reclamo y pidieron a las instituciones nacionales e internacionales correspondientes, para que asuman su responsabilidad para garantizar la continuidad de las prácticas esenciales de los pueblos indígenas que sustentan la pluriculturalidad de México, reconocidos por los instrumentos nacionales e internacionales.
Cuestionados sobre las posibles acciones legales y sobre el tiempo que dejaron pasar entre la denuncia en redes sociales y su pronunciamiento, las autoridades detallaron que el proceso en su comunidad que se rige por los usos y costumbres, requiere un análisis y acuerdos y que esperan que las autoridades los protejan de acuerdo con la firma de convenios internacionales.
Al respecto, el curador del Museo Textil de Oaxaca, donde se llevó a cabo la conferencia, ofreció el acervo del recinto y el del Jardín Etnobotánico de Oaxaca, para respaldar la antigüedad, diseño y simbolismo de la blusa. Así también la directora de la Escuela Libre de Diseño de Oaxaca, se solidarizó con la comunidad y puso a disposición su espacio para que los habitantes de Tlahuitoltepec realicen una colección propia.
