* La nueva administración de Estados Unidos no cree en los fenómenos del cambio climático global y en sus repercusiones, advirtió Humberto Urquiza García, del Programa Universitario de Bioética de la UNAM
* Está en contra de la evidencia científica que desde hace 20 años se conoce sobre sus efectos
Redacción.
Ciudad de México.- Con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no se verá ningún avance en materia de política ambiental internacional; algunas de las acciones que ha tomado esta nueva administración implican retrocesos en el combate al cambio climático, explicó Humberto Urquiza García, del Programa Universitario de Bioética (PUB) de la UNAM.
México enfrentará no sólo el asunto del muro y el endurecimiento de la política migratoria, sino también el problema ambiental, que deben entenderse en el contexto nacional y a escala mundial, dijo en el piso 14 de la Torre II de Humanidades.
En materia ambiental se avecinan tiempos difíciles, pues la administración Trump no está sensibilizada al respecto, “es incrédula ante los fenómenos del cambio climático global y sus repercusiones, va contra toda la evidencia científica que se ha generado en los últimos 20 años”.
Al participar en el coloquio Ecosistema 27/100, Miradas y Revisión del Artículo 27 Constitucional: Propiedad y Conservación del Medio Ambiente, inaugurado por Alberto Vital Díaz, coordinador de Humanidades, Humberto Urquiza indicó que el mandatario estadounidense, al igual que en su momento el expresidente George Bush, ha puesto en duda la información científica proporcionada por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
Además, prosiguió, el asunto de la construcción del muro para frenar el paso de los migrantes no sólo afectará a las personas, sino también a las especies de los ecosistemas en la franja fronteriza.
En 1948, aproximadamente, los entonces presidentes de Estados Unidos y de México entablaron conversaciones para fundar un parque binacional y generar un corredor ambiental en la frontera. “Ése debe ser un ejemplo por el que hoy deberíamos apostar”, subrayó.
Si la administración Trump no frena su escepticismo, retrocederán las medidas que ya se han tomado para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, como la Declaración de París, a la que se ha sumado nuestra nación.
“Debemos estar atentos, y aquí el concurso de la sociedad y de los universitarios es importante para generar ideas, debates y propuestas que nos permitan crear dinámicas y hacer frente a estos primeros cuatro años de gobierno de Donald Trump”.
En ese sentido, puntualizó que el pronunciamiento del rector Enrique Graue y de los titulares de las diversas entidades académicas de esta casa de estudios, es una declaración de principios sobre la cual se debería empezar a trabajar.
El documento, acotó, es una base importante; la UNAM debe ser el referente, por ser un reflejo de la sociedad, siempre dentro del ánimo de la tolerancia y el respeto a las ideas.
En el acto inaugural del Coloquio, Alberto Vital indicó que este foro, celebrado en el marco de la conmemoración del centenario de la Constitución mexicana, permite reflexionar sobre el significado de esta norma fundamental para los mexicanos y sus transformaciones.
Muchos de los temas que se presentan en las primeras planas de los diarios nacionales son abordados por los investigadores de las 270 áreas de estudios de los 11 institutos, siete centros, seis programas –uno de ellos el PUB– y dos unidades de investigación que integran el Subsistema de Humanidades
La Carta Magna cumple con su deber de brindar un marco de referencia jurídico, así como un elemento de confluencia para la preservación del medio ambiente, la propiedad y conservación.
En el foro también participaron Jorge Linares Salgado, director del PUB; Ignacio Sosa Álvarez, académico de la Facultad de Filosofía y Letras; Antonio Azuela de la Cueva, del Instituto de Investigaciones Sociales; y Alejandro Tortolero Villaseñor, de la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Iztapalapa.