Salvador Flores Durán
Oaxaca.- El vacío de poder que ha dejado Gabino Cué Monteagudo al final de su sexenio, ha provocado que los cárteles se disputen los territorios y hayan ensangrentado a Oaxaca, por la situación de ingobernabilidad provocada por los bloqueos carreteros, el movimiento magisterial, y la insurgencia popular, consideró el sociólogo Carlos Sorroza Polo.
Dijo que a esta situación se suma la inoperancia de las corporaciones policiacas estatales y federales, mientras que el gobierno federal es omiso y usa al sureste del país como “chivo expiatorio” para justificar la posible llegada al poder de un gobierno de mano dura en México.
En entrevista, el investigador del Instituto de Investigaciones en Humanidades de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (IIHUABJO), dijo que en Oaxaca vivimos “una descomposición social muy fuerte debido al vacío de poder que deja la ingobernabilidad. Hay una presencia muy fuerte del narcotráfico, y sus bandas se están disputando el territorio”.
Esta disputa, dijo está llegando a niveles de criminalidad muy críticos y preocupantes “porque tenemos prácticamente un vacío de poder, una situación de ingobernabilidad debido al termino del régimen de Gabino Cué y su enorme incapacidad de gobierno”.
Acusó que el ejecutivo estatal “prácticamente dejó todo por la paz y a lo único que se está dedicando es a entregar la estafeta al que sigue, y el estado se quedó con enormes problemas de movimientos sociales, como el magisterial, más un inicio de movimiento popular e insurrección popular, que amenaza al estado de Oaxaca y el sur de México”.
Ante este vacío de poder “se asoma el narcotráfico por todos lados, y está tomando realmente controlando territorios y esto para Oaxaca es sumamente ominoso y negativo”, planteó.
La ola delictiva que azota al estado ha dejado en los últimos 15 días más de 30 muertos, la mayoría ejecutados al estilo del crimen organizado, incluidas familias completas y menores de edad, muchos de ellos cometidos a plena luz del día, especialmente en las regiones de la Costa y el Istmo de Tehuantepec.
“Los bloqueos y todas las accione que están relacionadas con el movimiento social y popular que están ligados al movimiento magisterial, y que prácticamente crean una situación de ingobernabilidad”, también han propiciado este clima de violencia al final del sexenio de Cué Monteagudo, explicó.
Sorroza Polo dijo que a esta situación “lamentablemente también es auspiciada por el gobierno federal, que arroja una comportamiento de responsabilidad o de perversidad, realmente, que denuncia un total desinterés por lo que pase en Oaxaca y el sur de México”.
El autor de diversos libros sobre política en Oaxaca, dijo que “hay una gran responsabilidad del gobierno del estado y del gobierno federal, porque no está llevando a cabo las acciones de control y de conducción que deberían hacerse en todos los frentes. Hay una gama de problemas asociados, el magisterial, el movimiento popular, las zonas de vacío de poder, la injerencia del narcotráfico y todos los desmanes y vandalismo, y todo lo que se encuentra vinculado con estas situaciones”.
El académico de la UABJO, acusó que “hay una inoperancia de las policías estatales y federales. Están a la expectativa y no están actuando de manera directa, pero ellos reciben órdenes superiores, y sus órdenes superiores son dejar hacer y dejar pasar”.
Con toda esta situación de vacío del gobierno,“le apuestan a que se vea el sur de México, no solo Oaxaca, sino Chiapas y Guerrero, en una situación de exhibir al sur como una zona de ingobernabilidad, de caos social, para que realmente la gente a nivel nacional entre en una situación de incertidumbre, de miedo, que lleve realmente a un resultado para las elecciones del 2018”.
Acusó que el sur de México es usado para mostrar que el país necesita “un gobierno de orden, de control y de mano dura para poder retomar el control y la gobernabilidad a nivel nacional, ya ni siquiera a nivel regional”.
Recalcó que el sur “es lo que menos le importa al gobierno federal y a los gobiernos de los estados, es el ejemplo de lo que realmente tiene que ser inadmisible y tiene que ser totalmente inaguantable para la sociedad nacional”.
Enfatizó: “el sur es el chivo expiatorio de lo que no se quiere a nivel nacional, con enormes costos sociales, políticos y económicos para darle una vuelta a la situación electoral del 2018”.